Queridos hermanos y hermanas ¡YO SOY ADAMA!

Continuemos los comentarios sobre el capítulo 15 del libro I de Telos. Este capítulo está dedicado a las secuoyas.

Muchos se preguntan por qué Dios Padre/Madre hizo un planeta tan diverso, por qué tantas especies de plantas, animales, por qué, ¿Cuál es el sentido? Muchas tienen la misma función, pero ¿Por qué tanta variedad? Dios Padre/Madre en su infinita sabiduría creó un medio ambiente en total equilibrio, y este equilibrio depende del clima, de la posición de los ríos, de la posición del mar.

Cada planta de este planeta tiene su función, su estructura ligada a todo lo que ocurre en el planeta. De la misma manera tú fuiste creado con los mismos elementos del planeta, de lo contrario morirías porque no tendrías nada que comer. El alimento que Gaia, el planeta Tierra, da a todos los humanos es suficiente para mantenerlos vivos y sanos, porque proviene de la misma estructura que el propio planeta.

¿Qué ocurre entonces? Tras la caída de la conciencia de la civilización humana, la ruptura de la conexión con la Fuente trae también otras rupturas de conexión, entre ellas la conexión con la madre Tierra. El hombre se cree superior a todo, superior a la Tierra, superior a los animales y piensa que puede hacer lo que le gusta y lo que cree que debe ser para su evolución. Y todo el proceso de desequilibrio del planeta comienza a suceder.

Así que todo ese equilibrio creado por Dios Padre/Madre para mantener sus montañas erguidas, sin ningún tipo de derrumbe, para mantener sus ríos limpios, sin que nada llene el cauce por donde pasan haciendo que se desborden, todo ese equilibrio se ha roto. Las basuras arrojadas a sus mares, matando a los animales que allí existen y trayendo todo tipo de problemas para ustedes mismos; hoy coméis pescado contaminado totalmente por sus propias basuras arrojadas a los océanos.

Habéis creado una cadena de autodestrucción. Sí, nos damos cuenta de que todo esto estaba muy bien planeado, muy bien planeado, pero siempre hemos observado que lo habéis disfrutado. Siempre habéis atacado al planeta sin piedad. Muchos pueden responder: “Pero no teníamos la conciencia que tenemos hoy” También estamos de acuerdo con eso, pero es importante saber que sus almas siempre supieron lo que era el planeta, que era un espíritu vivo, un ser vivo. ¿Qué creéis que sería un orbe sin vida? Nada florecería, ningún alimento saldría de las entrañas de la tierra para la alimentación humana, el aire sería viciado porque no habría viento, no habría nada; sería un mundo totalmente inhóspito para ustedes, los humanos.

Así que esto siempre ha sido un ser vivo que dio todo lo que tenía a los humanos. Y se deforesta, se mata a los animales, en favor de un desarrollo que lo está matando, no evolucionando. El grito de las secuoyas es solo una parte de lo que el hombre decide hacer con el planeta. Destruye sus entrañas, contamina sus aguas, su aire, pero todo se encamina hacia la evolución. Algunos hoy han despertado al problema, luchan por el planeta. Parece que en este momento las almas han recordado donde vivieron realmente hace milenios, están intentando hacer su parte, pero desgraciadamente es como una reacción química, se inicia y es muy difícil pararla, casi imposible.

Así que han estado alimentando una gran reacción química que está trayendo los resultados de hoy. No, Gaia no es vengativa. Gaia es puro Amor, de lo contrario ya habría extinguido a los humanos de su superficie, porque lo que ya le habéis hecho, ella no tendría la más mínima razón para manteneros vivos en su cuerpo, pero los mantuvo y os sigue alimentando, os sigue nutriendo en todos los sentidos. ¿Y qué le devuelves? Más desequilibrio, más depredación, más degradación.

¿Y qué espera cosechar el hombre de todo esto? ¿El equilibrio y la supuesta evolución? Ya estáis viendo los resultados. Lo que ocurre hoy en su planeta es un conjunto de situaciones. Son los resultados de las reacciones que habéis provocado, el desequilibrio causado, sumado a los cambios del planeta para la ascensión. Sí, Gaia necesita tener energía para ascender. Ella es enorme y necesita toda la energía positiva posible para realizar la ascensión. Y para eso necesita eliminar mucha energía negativa, transmutar parte por parte.

Así que todo esto lo estáis viviendo ahora y lo viviréis cada vez más. Cada uno cosechando lo que ha sembrado. Cada uno cosechando su propia negligencia con el planeta, su propia negligencia con todo lo que estaba ocurriendo. Puede que digas: “No, yo nunca he talado un árbol”, pero ¿qué has hecho para evitar que se tale otro? Quizá nada. Estás molesto, estás indignado, pero ¿qué haces? Así que no mires al cielo preguntándote por qué ocurre lo que ocurre. Cada uno recogerá su parte, cada uno recogerá todo lo que ha sembrado; unos más otros menos, porque las grandes decisiones de los que gobiernan este planeta, ellos sí saben exactamente por qué hicieron todo esto, y tendrán su cosecha.

Ahora bien, los que os dejasteis llevar, los que nunca hicisteis nada, los que simplemente pensáis que es absurdo, pero no os levantáis del sillón para hacer nada, no actuáis, no intentéis cambiar nada, también cosecharás, porque tu inercia ayudó a que todo siguiera ocurriendo. No hiciste nada para impedirlo. Y no me respondas que no tenías conciencia. La conciencia es algo innato a sus almas. Yo diría que era más cómodo dejarse llevar por todo, vivir lo que os presentaban, vivir el supuesto desarrollo, la evolución, pero que os llevaba ¿a dónde? Os llevó a las adicciones, a las drogas, a la alimentación totalmente contaminada, a las enfermedades, al desequilibrio total. ¿Es esto evolución? ¿Es esto efectivamente tener equilibrio? Es evidente que no.

Entonces cada uno de ustedes cosechará, sí, nada quedará sin recompensa. No es venganza, es retorno, es la Ley de Acción y Reacción; no hay escapatoria, no hay manera de decir: “Yo no tengo nada que ver”. Todo el mundo tiene, todo el mundo tiene. Cada polvo químico que pones en la Tierra para que tus cultivos sean más bonitos, más grandes y más rentables, lo estás sembrando allí, y cosecharás cada onza de lo que has usado en el suelo de Gaia. Nada de lo que está en el suelo de Gaia necesita suplementos para crecer. Si hay contaminaciones y plagas, el hombre las creó por sí mismo, no existían, porque todo estaba en equilibrio.

Así que todo el mundo tiene qué cosechar. Nadie quedará impune. Digamos que aquellos que están cambiando sus hábitos y teniendo conciencia de todo lo que han causado y de lo que no han hecho, están en el camino correcto, porque ayudarán en el proceso inverso, ayudarán a traer conciencia a los demás. No es que esto simplemente borre todo lo que han hecho, pero será de gran valor, de gran ayuda para cambiar conciencias, porque esto también necesita hacerse.

Es como siempre decimos: Nunca pienses que eres demasiado pequeño para hacer algo. Si cada uno hace algo para el bien, sea lo que sea, genera una ola de Luz y Amor que contamina a los demás, y esto solo aumenta con el tiempo. Da el primer paso y seguramente verás el resultado.

Traducción: Kelly Neri

Revisión: Ana Maria Souza