¡Queridos hermanos! ¡SOY ADAMA!
Hoy comentaré el Capítulo 5 del Libro II de Telos.
Este es un capítulo muy importante, y me gustaría que cada uno de ustedes lo leyera con atención. Comentaré aquí los puntos principales, pero es importante que cada uno de ustedes lea y perciba en su corazón todas las verdades que te fueron dichas, y que podrás cuestionar de ahora en adelante.
El enfoque central de este capítulo, en su mayor parte, está en las plantas; plantas que quitan la conciencia, o que ustedes pasaron a creer que les ponen en contacto con energías de alta vibración. Les puedo asegurar que muchas de estas plantas fueron creadas por Dios Padre/Madre hace mucho tiempo, para ayudarnos a acceder a la información y a encontrarnos más fácilmente con nuestros maestros superiores, pero nunca huyendo de la realidad. Usábamos estas plantas para nuestro propio crecimiento, para nuestra propia evolución; no de forma recreativa o como algo para ser descubierto por curiosidad.
Eran plantas altamente vibrantes que cuando las utilizábamos, nuestra vibración llegaba a ser tan alta como las suyas, y podíamos así elevar nuestras vibraciones y tener contacto con seres más evolucionados. ¿Pero qué pasó? Con la caída de la conciencia, estas plantas ya no pudieron seguir teniendo los mismos fundamentos, aí, ellas fueron modificadas, ya no para traer la vibración y el contacto con seres superiores. Al contrario, fueron modificadas para que se bajara la vibración, y muchos se volvieran adictos o dependientes.
Como dije al principio, es necesario que lean el libro con mucha atención, porque muchos aquí usan estas sustancias, creyendo que están teniendo algún contacto con seres superiores. Les diría que todo es una ilusión, todo es un gran teatro formado por las energías con las cuales ustedes son puestos en contacto. Y muchos me podrán preguntar: “Pero lo hacemos con orientación, lo hacemos con el control de seres de alta vibración”. Entonces les pregunto ¿por qué necesitas un atajo para descubrir o conocer algo que tiene una vibración más alta? ¿Qué buscas? ¿Saltar un paso en tu camino? ¿Crees que recorriendo este camino alcanzarás más rápido el contacto con los seres superiores?
Repito de nuevo: ¡Pura ilusión! Aquellos que controlan tu experiencia, ¿hasta cuánto la controlan, ¿cuánto tu mente se deja controlar por ellos? ¿Y qué controlan? Intentan controlar el entorno al que te diriges, intentan atraer hacia ti una alta vibración, un entorno de Luz, para que incluso puedas tener tus contactos de manera efectiva, pero ¿será que está tu mente preparada para este control o será tu mente más fuerte? y tratar de participar o experimentarlo hasta el fondo del pozo?
Si te puedo dar aquí un consejo, Yo diría que cualquier intento es demasiado arriesgado, incluso con control, el acceso a los reinos superiores a través de tus plantas, porque no son las plantas originales que Dios Padre/Madre creó. Ellas han sido modificadas exactamente para que no permitan tales contactos. Así que hay una gran fuerza opuesta, que trata de atraerlos hacia el lado de la Luz, pero dependerá más de su conciencia que del control de ellos. Entonces, ¿por qué intentarlo? Quieres saber cosas de tu vida o quieres tener contactos, haz tu propia marcha de evolución.
Muchas almas llegaron a este planeta jóvenes que vinieron con una misión: estar listos para ser Pilares de Luz en el momento de la ascensión. Pero, ¿qué pasó con estos jóvenes? Fueron ilusionados, fueron engañados que podrían tener cualquier tipo de adicción a las drogas y salir impunes; impunidad no hacia Dios Padre/Madre, impunidad hacia su propio andar.
¿Qué hace una droga? Altera la conciencia, saca de la realidad, crea mundos ilusorios, porque a muchos de estos jóvenes no se les enseñó a encontrar la Luz dentro de sí mismos, no se les enseñó a tener a Dios Padre/Madre en el corazón. Se les enseñó a buscar fuera; todo lo que no hallaron. Luego se drogan, y en ese momento se escapan de la realidad. Ese es un momento de placer. ¿A qué precio, a qué costo? Como se dijo en el capítulo, las drogas alteran la conciencia y bajan la vibración al máximo. ¿Y luego qué pasa? Hay energías en el plano astral con conciencia que se alimentan de las debilidades, viven porque encuentran alimento en ustedes.
Entonces, cuando un joven se droga y baja extremadamente su vibración, atrae estas conciencias, serpentoides, muchas veces enormes, que toman toda la formas del cuerpo y comienzan a alimentarse de esa adicción, alterando física y mentalmente a ese huésped, haciéndolo sentir más y más la necesidad de tomar drogas, porque esa droga es el alimento de esa entidad. Y, literalmente van siendo llevados al inframundo; al inframundo de su mundo, porque hacen cualquier cosa para poder drogarse, y, literalmente al inframundo de las energías; donde será muy difícil que se recuperen.
Pero todo son elecciones. ¿No hay salida para estos jóvenes? ¡Hay! Siempre hay una salida, pero es necesario que sea hecha una elección; elegir salir de todo eso. Encontrar lo que se busca en las drogas, dentro de uno mismo, volver a estar en contacto con la Fuente, con el Yo Superior. Este será el primer paso. ¿Se curará rápidamente? Depende de cada caso, pero ciertamente la gran mayoría de los jóvenes que vinieron a este planeta para seren Pilares de Luz no podrán hacerlo, porque aunque abandonen las drogas hoy, no podrán ser Pilares de Luz, porque el cuerpo estará tan debilitado, no sólo el cuerpo físico, sino todos los demás cuerpos: etérico, emocional, estarán en ruinas y tendrán que ser recuperados.
¿Qué buscas cuando te drogan? ¿Un escape de la realidad? un momento de placer efímero? Te lo aseguro, son placeres efímeros. Cada vez más profundizarás en estas energías para lograr algo que no lograrán! Porque el equilibrio, la Luz y el Amor están dentro de ustedes,no afuera. No estoy aquí tratando de cambiar la mente de nadie. Esta es una elección que debe hacerse. No impuesta, no pedida. Es necesario que todos, no solo los jóvenes, porque también tenemos adultos adictos, que cada uno haga su elección y deje de engañarse con que ”La yerba “A” o la yerba “B” me lleva a un estado de elevación más alto”, porque esto no existe, ¡Esto es ilusión!
Ustedes están siendo engañados por esas entidades que están allí, en ese momento cuando ustedes se drogan. Un día tendrán acceso a estas plantas nuevamente, pero en su mundo actual ellas han sido contaminadas, han sido modificadas. Muchas tienen una función medicinal, como la marihuana, pero también fue modificada, ¿por qué? Mira las industrias farmacéuticas. Hoy hay algunos estudios al este respecto y han tenido éxito, pero ellas no son esas drogas creadas por Dios Padre/Madre, aún con todo el efecto que se está descubriendo, ellas siguen siendo manipuladas.
Entonces, me quedaría aquí mucho tiempo hablando, hablando, hablando y muchos seguirían concursando, concursando, concursando. Entonces es necesario que cada uno de ustedes lea el tema de este capítulo, con mucho corazón, con mucho Amor, y si están inmersos en este mundo, espero que cuando termines de leerlo, hagas una nueva elección. ¿Habrá tiempo para que te limpies hasta la ascensión? Esta respuesta no te la puedo dar, porque depende de lo profundo que estés. Ahora tampoco elijas: “Entonces si no voy a ascender, sigo!”, recuerda que estarás firmando todas las dificultades de tu próxima encarnación. O qué piensas, que reencarnaras hermoso y perfecto, a pesar de todo lo que hiciste con tu cuerpo por las drogas?
Piensa, piensa en lo que tendrás que pasar para aprender la lección. Así que no dejes para mañana una decisión que se puede tomar ahora. Pero, como siempre decimos: todo son escojas. Y en este momento de la marcha de cada uno, cada uno está haciendo elecciones; en todos los sentidos. La vida no terminará aquí. Ustedes seguirán reencarnando; si no aquí en la Tierra, en otros planetas, y todo lo que hoy están sembrando, lo cosecharán después. Esto no cambiará.
Entonces, ¿por qué no cambiar el curso de esta historia hoy, ahora? Se trata de cuán importante es tu búsqueda, de tu energía interior, del Amor y de tu propia evolución.
Traducción : Ingrid Elena Schonoor
Revisión: Ana Maria Souza