¡Queridos hijos e hijas del planeta Tierra! ¡YO SOY MARÍA!
Una vez más, traigo mi manto azul y os envuelvo a cada uno de ustedes con mucho Amor, con mucha Luz.
Hijos e hijas míos, no temáis a nada. Vivid el momento presente. No lo olvidéis nunca: los sentimientos que experimentéis hoy reverberarán en el futuro. Si emanáis miedo, temor y duda, cosecharéis más tarde. Olvídate de lo que te espera. Vivid el momento presente con gran alegría y paz. Llenad vuestros corazones de Amor y Luz.
No, esto no te impedirá pasar por lo que sea. Pero estarás preparado. No te dejarás llevar por el miedo, la duda o la inseguridad. Tienes que vibrar alto. Tienes que vibrar confianza. Tienes que vibrar la certeza de la victoria; la certeza de la evolución.
Cada uno de ustedes ha hecho una elección. No, ahora, no hoy; cuando encarnaste en estos tiempos: ser un Pilar de Luz; ser alguien que contribuiría al proceso de Gaia y al proceso mismo. Así que, si tomaste esta decisión, estabas preparado. Viniste con todas las armas apropiadas para cada momento. Es como participar en una gran expedición, en la que llevas todo lo necesario. Por supuesto, siempre faltará algo, pero lo principal siempre estará ahí.
Así que comprended: no estáis desprevenidos. Habéis traído con ustedes las armas de la Luz para luchar. Pero no luchas físicas, hijos e hijas míos; las luchas de ustedes contra ustedes mismos. Estas son las grandes batallas. Es como si tuvierais un clon invisible frente a ustedes; uno que siente, vibra, piensa todo lo que ustedes piensan. Y tenéis que destruir este clon; tenéis que acabar con él. Este clon tiene un nombre: es el ego.
Poco a poco, tenéis que aprender a sofocar el ego, a acabar con él. Para que ya no actúe en vuestras mentes, en vuestros corazones. Ya no habrá un “yo” a cargo de todo; habrá otra entidad: el “yo” y el Todo. Ya no estaréis solos. Porque en todo lo que pienses, decidas y hagas estará implicado el Todo.
Nada más puede ser para ti; siempre será para ti y el Todo. Es un cambio completo de paradigma, en el que dejas de pensar solo en ti, en sobrevivir, en mantenerte, en protegerte; para pensar en ti y en el Todo. Si todas tus acciones son buenas para ti y para el Todo. Este es el gran cambio. Este es el gran aprendizaje.
¿Qué le pasa a la gente hoy en día? No saben cómo lidiar con lo que están viendo. Porque se creían perfectos, maravillosos, increíbles. Y hoy se están dando cuenta de que no son nada de eso; están viendo sus propios errores. Y están llegando, muchos de ellos, a una velocidad increíble. Y no saben cómo afrontarlo.
La gran clave es el corazón. Es mirarte a ti mismo sin juzgarte. Aprender y comprender que cometiste un error; comprender el error; intentar no repetirlo; perdonar; pedir perdón. Siguiendo estos pasos, pueden liberarse rápidamente de todo esto, pero no quieren, porque su ego sigue demasiado inflado, sigue dominado por el mundo que ustedes mismos crearon. Y no quieren soltar ese mundo. No quieren renunciar a nada. Por eso tantas personas resultan ser violentas, malvadas. Parece que han cambiado; ya no son los mismos.
Y es verdad, porque la Luz que viene les muestra todo lo que son. Y todo les parece horrible. Pero no quieren cambiar. No quieren renunciar a nada. No quieren dejar este proceso. Y se enfadan cada vez más, porque no pueden dejar de ver sus propios errores, sus propios defectos. Y no saben que más hacer. Y esto les enfada profundamente. Y la mayoría de ellos empiezan a creer que es culpa de la otra persona. Encuentran a alguien que es responsable de hacerles ver todo esto. Esto explica el mundo tal y como es hoy.
Corazones cada vez más oscuros y violentos. Y estos mismos corazones con tantas dudas son absorbidos por esta masa que está ahí, tratando de causar el mayor daño posible antes de que se vaya, antes de que se destruya. Es consciente de ello, pero no caerá sola, como cree; se llevará a muchos con ella. Y, sobre todo, hará sufrir a los que son Luz, que serán atacados precisamente por ellos.
Así que cuando te decimos, sé Luz, sé Amor, en cualquier situación, es para que mantengas estas energías alejadas de ti. Para que estas personas no se acerquen a ustedes, no os alcancen. Todo es vibración, hijos e hijas míos. Si vibráis alto, no hay la menor posibilidad de que os alcancen. Ahora bien, si vibráis bajo, los atraéis. Y si no tenéis cuidado, sois atraídos al mismo proceso; porque aún tenéis sombras que destruir. Todavía tienes muchas cosas que aprender.
Sé inteligente. No te dejes llevar. No te dejes arrastrar por esas sombras. Deja que cada uno se ocupe de su propio camino. Al elevar tu Luz, elevas la Luz del Todo. Esa es la regla. Y al elevar la Luz del Todo, sofocas cada vez más esta masa, que se comprime día a día. Creedme, todo cambiará para mejor. Pero tenéis que mantener vuestros corazones vibrantes, iluminados.
No te dejes llevar por el dolor y el sufrimiento. Cada uno tendrá su parte. Cada uno tiene su propio camino. La Luz vencerá en cada alma. Créelo. Y aquellos que no estén listos serán llevados; pero eso no significa que serán llevados por las sombras. Muchos lo serán, porque vibran igual que ellas. Pero muchos simplemente no quieren renunciar a nada; no quieren cambiar. Así que todavía tienen un camino de Luz que recorrer. Así que continuarán por este camino en otra parte del universo.
Todo está siendo dirigido por la Luz. Incluso las almas oscuras serán dirigidas por la Luz. No tendrán el poder de decidir, o mejor dicho, no tendrán ningún poder. Este es el resultado final. Pero tenéis que prepararos para experimentar todo esto.
No será un tiempo fácil, pero será un tiempo necesario. Para que toda la preparación para la ascensión tenga lugar realmente.
Traducción: Kelly Neri
Revisión: Regiani M. Bugalho