Queridos hermanos ¡YO SOY ADAMA!
Hoy vamos a comentar el Capítulo 7 del Libro II de Telos.
El punto principal de este capítulo es la Llama Violeta, la Llama de la Transmutación, la Llama de la Libertad. El Maestro Saint Germain es el Chohán de este séptimo rayo y porta esta llama liberadora y transmutadora para este planeta en estos momentos; siendo el responsable de aplicar esta llama para que el planeta Tierra pueda ascender.
Hermanos míos, cada energía acumulada, cada energía vivida, de dolor, de sufrimiento, o practicada contra uno mismo o contra otro, crea un registro en el universo, un registro único, y hasta que sea transmutado, perdurable. Cada pensamiento, cada palabra, cada acción, cada sentimiento, genera una energía. Si está dentro de los patrones de la Luz, también retorna, pero retorna trayendo más Luz. Cualquier otra vibración fuera de los patrones de la Luz, es decir, cualquier vibración con baja intensidad, es contraria a la Luz, y estas vibraciones permanecen con aquellos que las generaron, no se disuelven, no se eliminan; se acumulan.
Sus almas son viejas, muchas encarnaciones en este planeta, muchas experiencias, y todas las energías generadas se acumulan en sus almas. Teóricamente, de una encarnación a otra, debería haber un aprendizaje, la no repetición de esas energías, para que de esta forma todo lo relacionado con ese tipo de energía se modificase. Pero con cada reencarnación, no había recuerdo, y solo se acumulaba más de la misma energía.
Pero Dios Padre/Madre nunca permitiría que un alma simplemente engordara con malas energías sin tener la posibilidad de limpiarlas, de eliminarlas. El Rayo Violeta tiene esta función de transmutar estas energías en Amor y Luz. Sí, esto es posible, siempre y cuando haya comprensión, sabiduría y aprendizaje con relación a cada tipo de energía generada. ¿Y cómo limpiar estas energías? Aprendiendo las lecciones con mucho Amor. Pero es necesario que además de aprender, se limpien todas estas energías, porque seguirían acumulándose en el alma como energías muertas, petrificadas, porque ya no tienen acción; la acción y la reacción se han completado, el aprendizaje ha tenido lugar. Así que permanecen interiorizadas en el alma.
¿Y cómo limpiar todo esto? A través de la Llama Violeta. No es difícil llamar a la Llama Violeta, basta que lo hagas con mucho Amor y con mucha voluntad para eliminar todo aquello que está acumulado en tu alma, pero que ya no tiene ningún tipo de acción, solo quedó allí como resultado de todo lo que viviste y transmutaste. Luego pidan diariamente que la Llama Violeta transmute todas esas energías que se han acumulado en sus cuerpos, y que ya no tienen ninguna acción, en Amor y Luz, para que sus almas comiencen un proceso de limpieza. Haced esto y veréis la diferencia.
Incluso aquellas energías que aún no has aprendido, aquellas lecciones que todavía insisten en volver, pide ayuda a la Llama Violeta. No, no eliminará tu lección, pero sin duda le quitará gran parte de su intensidad, para que pases por esa lección de una manera más suave, pero necesaria para tu aprendizaje. Utiliza la Llama Violeta sin límite, tan a menudo como quieras. Haz tus propias invocaciones. No es necesario que sigas nada preestablecido. Escucha a tu corazón y haz tus propias invocaciones. Trabaja con la Llama Violeta cada día, cada momento, y verás la diferencia total en tu vida.
Deja que la Llama Violeta guíe tus caminos. Ríndanse a esta llama infinita y maravillosa, a este poderoso rayo. Invoca al Maestro Saint Germain para que te ayude con la Llama Violeta. Haced la meditación indicada tantas veces como queráis, pero es primordial que creéis vuestras propias invocaciones diarias y aprendáis a entregaros al flujo, a entregaros a la Luz para que se cumpla todo el camino designado por el Dios Padre/Madre y por vuestro Yo Superior; no los caminos que vuestro ego quiere seguir, sino los que efectivamente llevarán a vuestra alma a la evolución.
Cree, no intentes manipular el camino. Cree que la Luz traerá lo necesario para tu viaje. Deja de insistir en seguir lo que crees que es correcto. Sigue solo aquello que el Ser Superior te dirija, y utiliza la Llama Violeta para transmutar todas y cada una de las energías que puedan impedirte seguir el camino correcto.
Traducción: Kelly Neri
Revisión: Regiani Maria Bugalho
