¡Queridos hermanos y hermanas del planeta Tierra! ¡SOMOS LOS ÁNGELES!

A muchas personas les molesta nuestra forma, porque hay tantas variaciones de nosotros que no pueden simplemente unirse a los humanos con alas. Existimos en todo el universo. Entonces, ¿por qué existiríamos sólo en forma humana?

Somos esencias de Luz. Somos Luz con conciencia. Somos seres poderosos. Mucha gente piensa que en realidad no tenemos ningún poder porque estamos tan cerca de ustedes, y que su energía nos contamina y acabamos perdiendo nuestro poder. ¿Qué tipo de Ser de Luz es éste? ¿Qué Ser de Luz se deja envolver por la energía no tan elevada de los humanos?

Ustedes no comprenden el poder que tenemos. Estamos en todas partes. Somos constructores. Somos organizadores. Somos protectores. Tenemos muchas misiones. Podemos decir esto: fuimos creados para ser protectores de los humanos en este planeta.

Así que vale la pena decir que hay millones de papeles para nosotros; uno en cada orbe, en cada punto del universo. Nuestra misión aquí es proteger a todos y cada uno de ustedes. Es mantener, asegurar que el camino del alma se cumpla. Pero siempre hay una trampa: existe el libre albedrío; hay elecciones. Y nos sentimos muy tristes cuando nos damos cuenta de las elecciones equivocadas que hacéis.

Para nosotros, los errores no existen. Lo decimos así para que lo entiendas. Podemos verlo así: elecciones equivocadas – aquellas que os alejan de la Luz; aquellas que dañan sus cuerpos; aquellas que os convierten en seres sin amor. Pero tened siempre en cuenta que se trata de elecciones.

Ningún ser nace malo. Todos los seres nacen a imagen y semejanza de Dios Padre/Madre. Todos son Luz. Las elecciones hacen que esta Chispa disminuya, pero nunca se apaga. Se apaga cuando se pierde el ropaje humano. Porque es lo que mantiene vivo el fuego en tu cuerpo.

Somos poderosos. Pero no nos tomáis muy en serio. Crees que somos niños jugando a tu alrededor. Crees que debemos salvarte de cualquier problema, de cualquier desastre, de cualquier incidente que te perjudique física o emocionalmente. Y entonces te lo volvemos a recordar: tienes libre albedrío.

Sí. En determinadas situaciones, actuamos intensamente, evitando que mueras físicamente, evitando que te hagan daño; a menudo llamando tu atención para evitar un problema. Nos gusta hacerlo. Y cuando salimos victoriosos, nos alegramos aún más. Cuando conseguimos sacarte de un paso en falso.

Confía en nosotros. Somos seres extremadamente poderosos. No tienes ni idea de lo que somos capaces. En grupos, a miles o sólo a uno, alrededor de cada uno de ustedes. Si quieres pensar en nosotros como humanos con alas, siempre seremos así; siempre nos verás así. Como tú con alas. Es una imagen hermosa. Nos gusta.

Pero recuérdalo: No estamos a tu lado como un adorno, como una estatua que permanece estática, ni corriendo detrás de ti todo el tiempo. Estamos muy cerca. Somos los seres más cercanos a ti, pero no estamos pegados a ti. Estamos a una distancia prudencial. No por nosotros, sino por ti. Para que podamos ver el conjunto, no sólo a ti.

Identificamos todo lo que te rodea. Esta es nuestra misión, este es nuestro trabajo. Y podemos ser lo que queramos. Una pelota de luz, una chispa, una luz en el rabillo del ojo; lo que queramos. Sentid nuestra presencia en vuestros corazones. Hablad con nosotros.

Pídanos ayuda. Pídanos que les mostremos algo. Y estaremos encantados de ayudarte, de enseñarte cualquier cosa. Digamos que somos tu ayuda inmediata en cualquier situación. Cuando nos damos cuenta de que la situación es grave, entonces llamamos a los maestros; a los maestros del alma, para que actúen y nos ayuden a resolver, o al menos a intentar resolver, el problema.

¿Y por qué intentar resolverlo? Porque debemos respetar siempre el libre albedrío. No podemos cambiarlo todo. Si quisiéramos, te llevaríamos en brazos para que nunca sufrieras ni te hicieran daño. Pero no podemos. Es que con cada paso hacia la Luz, tú nos haces más grandes. Tu Luz alimenta nuestra Luz.

No, no somos débiles. No dependemos de tu Luz. Pero cuanta más Luz emanas, más crecemos, y nos hacemos más y más y más grandes a tu alrededor. Así que date cuenta de la fuerza que tienes a tu alrededor. Somos poderosos. Somos conscientes de nuestro poder. Y cuanto más alto vayas en este viaje de Luz, más cerca estaremos. Y la protección se hace cada vez mayor. Porque es necesaria.

Cuanta más Luz, más ataques. Así que necesitamos extender nuestras alas a tu alrededor para que nada, nada pueda golpearte.

Para el Código de Luz de hoy, te dejamos con las siguientes frases:

«Yo Soy un ser cristalino.

Yo Soy un ser en evolución.

Yo Soy un ser poderoso.

Y camino con los Ángeles en todo momento».

Después de estas frases, di esta palabra: Angelicátum. Angelicátum. ¡Angelicátum!

Somos seres poderosos. Cree en eso. Confía en nuestro poder. Pide pruebas de que estamos cerca de ti, y te las daremos. Pide de corazón. No como un sustituto de la duda. «Oh, voy a ver si realmente lo están». Entonces no haremos nada. Estate en tu Divina Presencia y pídenos una señal. Y te la daremos. Créeme, somos seres poderosos. Y como tales cuidamos de ti.

Traducción: Ana Maria Souza

Revisión: Regiani M. Bugalho