¡Queridos! ¡YO SOY EL ARCÁNGEL MIGUEL!

Comenzaré nuestro encuentro de hoy hablando sobre las palabras de Sananda. Por lo tanto, es bueno que podamos hablar, como ustedes hablan, en vivo, para que podamos tratar de aclarar lo más posible lo que va a suceder. Pero antes de entrar en materia, me gustaría retomar un viejo tema, el de la vibración. Es un tema del que ya se ha hablado muchas veces, ¡pero no está de más recordarlo!

Eres lo que vibras, si vibras Amor, Luz, Calma, todos esos sentimientos que son de altas frecuencias, nos atraes. Atraes a todos los seres de Luz que puedan estar a tu alrededor. Y lo contrario también es cierto, si no vibras Luz, si no vibras amor, nos alejas. Entonces, cuando hemos dicho aquí, muchas veces, que en el momento de la desesperación, no te olvides de llamarnos, esto es verdad. Esto no ha cambiado. En ningún momento ha cambiado. En ningún momento hemos dicho: “¡Mirad, a partir de ahora no nos llaméis más, por favor, porque estaremos tumbados en la hamaca, durmiendo!”. ¿Lo hemos dicho alguna vez? ¡No! Una cosa es llamarnos y otra cosa es depender de nosotros. Entonces, te voy a poner otro ejemplo: tú eres esa persona que es extremadamente insegura, que no puede resolver nada por sí misma, siempre necesitas la opinión de otra persona. Ah, añado yo, necesitas varias opiniones y al final no sabes cuál seguir. Entonces, te digo: ¿qué es esto contra lo que luchamos? ¡No es el otro quien te dará la mejor opción! No es el otro el que te mostrará el mejor camino. No es el otro quien te va a decir: “¡Ve por aquí o ve por allá! El otro tiene su visión. No está en ti. ¡No tiene sentimientos! ¡No tiene tu experiencia! Y lo que es más, ¡no es tu alma! Entonces, ¿por qué depender del otro? Entonces, aquí es donde hablamos: no hay otro, existe el Yo Superior, porque el Yo Superior está dentro de cada uno de ustedes. No está fuera. No es atraído por sentimientos buenos o malos. Está ahí todo el tiempo, hagas las cosas bien, hagas las cosas mal, ¡está siempre ahí porque es él quien guía tu alma!

Entonces, aquí es donde decimos: ¡pídele a tu Ser Superior que te guíe!  De acuerdo, aún puedes ser esa persona que no toma ninguna decisión por sí misma, siempre has aprendido a depender de los demás. Entonces, haz esto: depende de tu Yo Superior, porque al menos sabrás que Él te guiará por el camino correcto. Llamarnos es algo que puedes hacer cuando quieras y como quieras, siempre que no sea: “Arcángel Miguel, ayúdame a decidir esto: ¿compró A o compro B?”. ¡No te daré la respuesta! No queremos esa dependencia. ¿Estamos aquí para ayudarte? Sí, estamos aquí. Nuestro papel es proteger, curar, amar, ¡hacerlo todo! Pero no ser los que te muestren el camino a seguir. Es tu Yo Superior quien te mostrará el camino correcto a seguir, ¡no nosotros! Entonces, las decisiones de Sananda son mis decisiones. ¡¿O recuerdas que hace un tiempo tampoco vinimos aquí por mucho tiempo!? ¡Y te aseguro que te ha venido muy bien! Por lo tanto, te digo lo siguiente: ¡recuerda todo lo que ya se ha dicho! Toma notas, ponlo todo por escrito para que no se te olvide, ¡esto es importante! Porque mañana, cuando te encuentres solo, sin nadie a tu lado, sin ninguna comunicación, ¿qué tendrás? Tus papeles. ¡Tendrás todo escrito y sabrás exactamente qué hacer! Lo que percibo en todo esto que se dice y que no os creéis mucho, es que pensáis que estamos aquí inventando historias. ¡No podemos hacer nada al respecto! Nunca me verás a mí ni a ningún otro ser de Luz pidiendo: “¡por favor, créanme! Esto tiene que salir del corazón. O crees o no crees. No hay término medio: “¡Oh, creo un poco! Creer un poco no es creer. No existe el término medio. O crees al 100% o no crees al 100%, ¡no hay otros porcentajes!

Por eso, quiero dejarte un mensaje muy importante: ¡estudiar! Escucha cada vídeo como si fuera un libro, ¡como una asignatura a estudiar para un futuro examen! ¡Anotad cada punto que veáis interesante y que merezca la pena observar! Te diré que tendrás mucho trabajo porque son cinco años de vídeos diarios, no hay fines de semana. Haced cuentas, ¡cuántos vídeos! ¡Son muchos! Así que, ¡utiliza este material para estudiar, para aprender, para tu evolución! ¿Y qué será importante también? Cuando un hermano, los que están empezando a despertar, venga a ti… “¡ayúdame, quiero entenderlo todo! ¡Habréis tomado nota! “Mira, aquí aprendes sobre esto, en este otro, aprendes este tema. Entonces, estarás haciendo un gran trabajo, ¡dejando todo listo para los que llegarán después, ávidos de comprender, ávidos de aprender! Así que, ¡hazlo! Resume todo lo que has aprendido hasta ahora. Marca los vídeos que son importantes, los que aportan enseñanzas profundas. Deja a un lado los vídeos de procedimientos, de regañinas (como tú los llamas), porque ya no encajan. Todo lo que se hacía al principio, ¡ya no sirve! Por lo tanto, elijan vídeos que traigan efectivamente un tema importante, marquen estos vídeos, ¡trabajen juntos! ¡Estudiad los vídeos! ¿No estudiáis las Cartas de Cristo? ¿No estudiáis el Viaje de la Llama Violeta? Entonces, ahora, voy a darte otra idea: estudia todo lo que te enseñamos. Trabaja en separar lo que es realmente importante. Y entonces, mañana, cuando llegue alguien, todo lo que dirás será “¡Mira, mira estos vídeos y lo entenderás!” ¡Qué trabajo tan maravilloso! Y lo diré de nuevo: ¡tendrás mucho trabajo que hacer! ¡No dependas de esta porque no tendrás tiempo para eso! ¡El trabajo será tuyo! Ella puede incluso crear el grupo para que estudies. ¡Estudia! ¡Repasad los temas! Releed en vuestras mentes, ¡recordad todo lo que ya se ha dicho! ¡Esto será fantástico para ustedes! No, no estoy pensando aquí en grupos por ciudades, ¡no, no! Esto es Cartas de Cristo, ¡no es así! ¡Es un grupo grande! ¡Y que, por cierto, les aseguro, pocos participarán, muchos no tendrán paciencia para leer, para escuchar! Así que, quien esté interesado, ¡que se una al grupo y empiece a estudiar! Haced una biblioteca de temas: el tema tal y tal está en este vídeo, en aquel, en aquel, en aquel. Haced un gran libro, ¡un libro de enseñanzas! “Ah, ¿cuánto tiempo va a llevar esto?”. ¡No estoy preocupado! ¡No estoy preocupado por eso! Y os diré algo más: si os ponéis en situación de entregaros a este trabajo, ¡tened por seguro que estaremos ahí mismo con ustedes, haciéndoos ver el tema que estáis dejando pasar! Y entonces, ¿quién se atrevería a hacer este trabajo? ¡No hay plazo! Es solo un estudio en el que tú organizas los temas. ¿No es interesante? ¿Vas a revisar todos los vídeos? Deja a un lado los que no aporten ningún tipo de enseñanza. Esos, los pones en otro armario. Abre un armario y pon los vídeos que no sirvan para nada, ¡ponlos ahí! Los vídeos didácticos, ¡ponlos en otro armario! Estoy seguro de que muchos de los presentes sabrán cómo hacerlo y será fantástico porque participarán, repasaré, estudiar en, ¡intercambiamos ideas entre ustedes! Y nosotros estaremos aquí, fuera, observándonos, ¡ayudando a esta gran obra! Pensad en esto: ¡viene alguien y quiere aprender! Tú le dirás: “¡mira todos los vídeos del canal! La persona te mirará y dirá: “¡ja, ja, ja! ¡Me estás tomando el pelo! ¡No puedo permitirme verlo todo! Entonces, le preguntarás: “¿qué tema te interesa?” “¡Ah, quiero hablar del amor!” “¡Entonces, escucha este, este, este y este vídeo y lo sabrás todo sobre el amor!”. ¡Mira qué interesante! ¡Mira qué fantástico! No estoy obligando a nadie a hacer eso. Es solo una idea, para que dediques tu tiempo a recordarlo todo y a reprender muchas cosas que ya se han dicho. ¡Es importante! Crea un mecanismo en el que varias personas escuchen el mismo vídeo y cada una escriba lo que le parece importante. Si la mayoría encuentra un punto importante, va a ese armario de vídeos importantes, ¡si no va al otro armario! ¡Esta es una forma de trabajar! ¡No es escuchar e imponerse a los demás! “¡No, este me ha gustado!” “¡Pero si no tiene nada interesante!” “¡Pero si me ha gustado!” ¡No, no es así! Muchos escucharán y si hay un punto realmente importante y todos ven este punto, ¡ahí hay un punto para llamar la atención! ¡Así es como vas a trabajar! ¡Nada demasiado complejo! Nadie reescribirá los vídeos, ¡es solamente una secuencia, solo una biblioteca de temas! Tema amor: vídeo uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ¡hasta cien! Vídeo sobre la esperanza: ¡uno, dos, tres, cuatro y así sucesivamente! ¡Espero que lo hayas entendido! ¡Es algo sencillo y os garantizo que os hará mucho bien porque estoy seguro de que la mayoría no querréis hacerlo! ¡Ustedes ya lo saben todo! No quieren recordar nada, ¡ya lo saben todo! ¡No querrán perder el tiempo estudiando algo que ya han aprendido! ¡Pero les garantizo que ya lo han olvidado! Así que, ¡piensa! Piensen mucho en ello e intenten hacer este trabajo, ¡será interesante y les garantizo que aprenderán mucho!

Aclaremos una cosa: no estamos diciendo que no vayamos a volver nunca. No estamos diciendo aquí que mañana no habrá más vídeos. ¿Hemos dicho eso? No, no lo hemos dicho. Por lo tanto, habrá un momento adecuado para parar. ¡Solo estamos advirtiendo, alertando! Ahora, que quede muy claro para todos: ¿pueden buscar otro canal aquellos que necesitan orientación o que necesitan escuchar mensajes? ¡Claro que pueden! ¡Adelante! ¡La elección depende de cada uno de ustedes! O elegirán estudiar todo lo que ya han aprendido, o correrán tras nuevos mensajes de otros canales, ¡no hay problema! No estamos aquí prohibiendo nada a nadie, ¡porque esa no es nuestra intención!

Así que, hermanos míos, ¡sabed tomar vuestras propias decisiones! ¡Sabed elegir el camino que queréis seguir y seguro que lo conseguirás! ¡Habéis cambiado mucho! ¡La gran mayoría de los que estáis aquí! ¡Pero yo diría que todavía faltan algunos pasos antes de que podáis decir efectivamente que tenéis vuestro billete en la mano! ¡Aceleremos estos pasos! ¡Intentemos encontrarlos! ¡Este es tu camino! Espero sinceramente que quieras hacer este trabajo y te aseguro que el resultado, en el futuro, ¡será espléndido! ¡Ah, de esto puedes estar seguro!

Como ella ha dicho, hoy no me extenderé demasiado. Es demasiada energía para su debilitado cuerpo. Así que me quedaré aquí, pero estad seguros: ¡nunca os abandonaremos! El hecho de que no traigamos mensajes no significa que nos hayamos ido a otro Universo a tumbarnos en una hamaca y dormir. Tenemos mucho trabajo que hacer y, entre este trabajo, ¡el mayor de todos es cuidar de cada uno de ustedes!

Tradición: Bernadete Maria Marafon

Revisión: Regiani Maria Bugallo