Queridos hermanos y hermanas del planeta Tierra ¡NOSOTROS SOMOS LOS ARCTURIANOS!

Es maravilloso y magnífico ver la ola de Amor que se está emanando en el planeta, extendiéndose; consumiendo los egregores negativos; consumiendo el mal, el miedo, el odio, la violencia. ¡Es magnífico!

Todos estamos emanando Amor y Luz al planeta. Ha llegado el momento del gran cambio. El momento de la liberación ha llegado. Y si cada uno de ustedes hace su parte, alcanzaremos este momento más rápidamente.

Cada uno necesita elegir, no solo por sí mismo, sino por el Todo. Cada uno tiene que ser consciente de su papel en este momento. Muchos de ustedes se adhieren a las energías curativas, pero no hacen nada con ellas. Todas son energías de Amor, de Sanación. ¿Por qué no darlas? ¿Por qué no transmitirlas?

¿Por qué no difundes estas energías?

No lleva mucho tiempo. Cinco minutos para una energía de Luz es una enorme cantidad de tiempo; es una enorme cantidad de poder. Cada uno de ustedes haga su parte. No esperes a los demás. Haciendo tu parte, cumpliendo tu misión, estarás ayudando a todos los demás hermanos y hermanas del planeta.

Abran sus corazones. Sean humanos. Amad incondicionalmente a vuestros hermanos y hermanas. Este es un gran ejercicio; un gran momento; para que cada uno de ustedes se dé cuenta de que al emanar Amor hacia otros hermanos y hermanas, no haréis ninguna distinción; no haréis ninguna separación; y todos lo recibirán. Vuestros enemigos, aquellos a los que odiáis, aquellos con los que estáis enfadados, aquellos a los que teméis, aquellos que os han hecho mal alguna vez, aquellos que siembran la guerra; todos recibirán vuestro Amor.

Así que esta será una primera sesión de entrenamiento para el Amor Incondicional. Mientras envías tu energía de Amor y Sanación, dite a ti mismo: «La envío a todos mis hermanos y hermanas, incondicionalmente». Tu corazón se estrujará, tu mente vibrará, tu ego gritará. Pero si te mantienes equilibrado, fuerte y decidido, tu energía de Amor y Sanación llegará a todos.

Tú eres solo uno: un vaso de agua. Si echáis ese vaso en un recipiente, no bastará para llenarlo. Pero si cada uno de ustedes echa un vaso de agua, el recipiente se llenará. Y en este caso de las energías, no olvidéis que todos estáis conectados. Toda la energía que lanzáis a esta gran red reverbera por toda la red. Y si todos lo hacen, todo reverbera.

Haz tu parte. No te quedes esperando a los Seres de Luz. La humanidad debe tomar las decisiones. Cuantos más seres emanen Amor, cuantos más seres emanen Luz, más se acelerará el proceso. Porque la humanidad necesita tomar la iniciativa en este proceso; por tu libre albedrío.

No te sientes a esperar a los Seres de Luz. Habrá un tiempo, sí; habrá un límite; pero si actúas, si fomentas el Amor y la Luz en este planeta, todo se acelera, y el momento crucial sucede. Observa tus propias responsabilidades. Sé consciente de lo que estás haciendo.

Las energías del Amor y la Sanación se traen aquí para ser utilizadas. No para ser acaparadas o sólo para que te luzcas. No hay más tiempo para el ego. Ya no hay tiempo para el ego. Este es un tiempo diferente; es liberación, es Amor puro. Así que actúa en consecuencia. Y verás cuánto cambiará tu vida. Porque el Amor que entregues volverá a ti de muchas formas. Inténtalo.

Eres corresponsable de todo este proceso. Actúa. Actúa con el corazón.

Para el Código de Luz de hoy, te dejamos con los siguientes mensajes:

«Tengo libre albedrío.

Puedo cambiarlo todo.

Tengo el poder de cambiarlo todo.

Y cambio mi mundo, con Amor y Luz».

Después de estas frases, di la siguiente palabra

 ¡Unión! ¡Unión! ¡Unión!

Y no lo olvides: Todos estamos actuando. Forma parte de este gran grupo. Actúa tú también. Y todo sucederá más rápidamente.

Traducción: Kelly Neri

Revisión:Regiani Maria Bugalho