¡Queridos hermanos del planeta Tierra! ¡SOY ASHTAR SHERAN!
En este momento, una gran pelota de Luz rodea este planeta. ¿Es azul? Sí, vista desde el universo, es azul. Pero si miras un poco más profundo, verás esta bola de energía. La Luz domina el planeta.
Mucha gente piensa: «Si la Luz domina, ¿por qué el planeta sigue como está?» Sólo hay una razón: el libre albedrío humano. No podemos invadirlo. No podemos obligar a la gente a hacer nada. Cada uno tiene que tomar sus propias decisiones.
Hoy, en sentido figurado, es como si hubiera aparecido una puerta ante cada ser vivo pensante de este planeta. Muchos tienen el valor de abrirla. Muchos tienen el valor de descubrir lo que hay más allá de la puerta. Muchos la ignoran. Y muchos albergan miedo. Así que no esperes que la luz entrante cambie nada.
Sí, está cambiando internamente a cada uno de ustedes. Cambiando sus estructuras, cambiando su forma de pensar, su forma de actuar. Observad. Haz un pequeño autoanálisis. ¿Eres el mismo que eras hace un tiempo? Algo ha cambiado. ¿Qué ha cambiado? Intenta notar los cambios en ti mismo.
Pensamientos que ya no aparecen. Palabras que ya no habitan en tu boca. Acciones totalmente diferentes. Soluciones que aparecen. La vida avanza. No de forma perfecta, sino inteligente, trayendo lecciones pero permitiendo encontrar soluciones. A aquellos que no ven nada, que no perciben nada, les diría que abran más su corazón. Crean realmente en todo el proceso.
Muchos de ustedes están despiertos, sí, pero no creen en el proceso. Conocéis toda la historia, seguís todo el proceso, pero no creéis en él. No creen en lo que sucederá. No creen que este planeta pueda evolucionar. Esto les cierra el corazón. Y la Luz que llega hace poco. Porque la puerta está cerrada.
Tienes que abrir tu corazón para recibir esta Luz. Tienes que dejar que funcione. Tienes que creer en todo el proceso. No lo olvides: el libre albedrío sigue reinando. Así que no ocurre nada que tú no quieras. Si no quieres participar en el proceso, si no quieres que la Luz actúe, no actuará. Simplemente llevará a cabo la transformación necesaria, pero tú seguirás siendo el mismo. Nada cambiará.
No esperes que la Luz lo haga todo. Muchas personas ceden a sus deseos…, «Oh, dejemos que la Luz haga su parte», pero no provocan el cambio interno. En realidad no cambian. Piensan que la Luz debería hacerlo, sin que ellos tengan que hacer nada; sin que ellos tengan que hacer ningún cambio. Desgraciadamente, esto no existe.
El cambio tiene que venir de cada uno de ustedes. Son comportamientos, palabras, acciones y pensamientos que necesitan estar en el camino presentado por la Luz. Y la vida fluirá, trayendo todo lo necesario para tu evolución y tu preparación.
Ver lo que está bien y lo que está mal es importante. Ver dónde necesitas mejorar también es muy importante. Así que busca el cambio. No esperes a que la Luz haga nada. No esperes a que otro haga algo. No es creyendo en Dios Padre/Madre, no es creyendo en ninguno de nosotros, que cambiarás. El cambio viene de adentro hacia afuera. No de afuera hacia adentro.
Así que deja de poner tu propio cambio en las espaldas de los demás. Es tuyo. Te pertenece. Así que tienes que provocarlo. No el entorno externo, no los Seres de Luz, no los demás. No basta con estar despierto, tienes que actuar como tal. Tienes que creer en lo que estás haciendo y en lo que está ocurriendo. Tienes que involucrarte. Tienes que sumergirte en todo el proceso.
No se trata sólo de meter los pies en el agua. Necesitas todo tu cuerpo. Salir a la superficie algunas veces para respirar, pero estar inmerso en el proceso la mayor parte del tiempo.
Entended, hermanos míos, no esperéis nada. «Ah, cuando vea algo, empezaré mi cambio». Os aseguro que será demasiado tarde. Porque cuando el proceso realmente comience, no habrá tiempo para que cambies. La mecha es corta. Muy corta. El cambio tiene que ser gradual, lento y profundo. Tampoco puede ser superficial, como tú dices: «de la boca para afuera». Tiene que ser un cambio completo, un cambio interno que te haga efectivamente elevarte y alcanzar frecuencias más altas. No seremos nosotros quienes te ayudemos.
Piensa siempre en lo siguiente: con el tiempo, te has librado de las cargas que llevabas de vidas pasadas. A través del perdón, has limpiado todo lo que llevabas. Muchos lo hicieron, muchos no. Los que se han limpiado se han vuelto ligeros; tan ligeros que flotan. Cuanto más ligero eres, más flotas. Los que no quieren cambiar nada, no quieren perder nada, no quieren hacer nada, siguen ahí abajo, aferrados a la Tierra.
Así que aquellos que están flotando ciertamente serán absorbidos por las nuevas frecuencias de la Quinta Dimensión. Porque se han permitido cambiar, se han permitido ser puros, prácticamente puros, para llegar allí. Los que no están flotando, por desgracia, no tendrán la misma oportunidad. Sólo les diría una cosa: Corran desesperadamente hacia su cambio, porque el tiempo corre. Y dentro de poco, los que flotan estarán todos en la Quinta Dimensión.
Para el Código de Luz de hoy, les dejo con las siguientes frases:
«Tengo libre albedrío.
Tomo mis propias decisiones.
Para la Quinta Dimensión, necesito hacer elecciones.
Pero antes que nada, necesito hacer mis cambios internos».
Después de estas frases, di esta palabra 3 veces. ¡Cacitóprium! ¡Cacitóprium! ¡Cacitóprium!
No lo olvidéis, hermanos míos, el tiempo se acaba. Ya casi hemos llegado. No queda mucho tiempo. Pero siempre habrá tiempo para aquellos que realmente quieran cambiar. Inténtenlo. Al menos intentadlo, para no arrependiros después.
Traducción: Ana Maria Souza
Revisión: Regiani M. Bugalho
