La Luz llega; transforma, limpia, cumple su papel. Ahora mismo, este planeta está rodeado de mucha Luz. Pero no podemos decir que esté todo iluminado. Como hemos dicho, los egregores de baja vibración están siendo consumidos por la Luz que está llegando y por el Amor que emana de cada uno de ustedes.

Pronto se escribirá un nuevo capítulo en la historia de este planeta. Un capítulo de evolución, un capítulo de cambio; pero no solo del planeta en sí. Será el cambio de muchos, de millones, que en este momento se están preparando, o ya están listos, para continuar sus caminos de evolución.

El cambio en vuestros cuerpos es grande. Porque hay que perder la base de carbono y pasar a la base cristalina. Muchas personas piensan o no pueden entender cuando hablamos de la base cristalina. Algunos entienden que parecerán cristales. No. Así que vamos a entender.

¿Qué es un cristal? Es una conciencia viva, que se expande, que tiene el poder de equilibrar, de emanar energías, de absorber energías; y es lo suficientemente consciente como para saber exactamente lo que está haciendo o lo que debería estar haciendo. Sigue siendo complejo para ti cuando hablamos de conciencias. No todo es un cuerpo físico.

El universo tiene muchos tipos de conciencia, que actúan sobre muchos materiales, podemos decirlo así. Así que los cristales son uno de estos tipos de conciencia. Así que podemos simplificar y decir que un cristal es energía pura. Tiene una conciencia y trabaja con energía. Emana, absorbe, trata, equilibra; varias funciones, dentro de una base cristalina. Dentro de una base tan dura y firme como es el cristal. Muy buena.

¿Cuál será la base cristalina en ti? No se convertirán en pura energía. Seguirás teniendo el cuerpo físico. Porque la sutileza de un cuerpo va de la mano con su evolución. Entonces ustedes serán cuerpos capaces de vivir en otra dimensión; en la Quinta Dimensión. Y para que ustedes puedan ser vistos por los demás, necesitan mantener cierta solidez. No podéis ser solo energía. De lo contrario, sólo serían almas caminando por el planeta.

¿Tendrían el poder de verse a sí mismos? Sí, lo harían, pero no en este momento. No se verían, igual que la mayoría de nosotros, no vemos a las almas caminando por el planeta. Pero están ahí; almas muy elevadas; almas que son conciencias puras de Amor, y que no son humanoides. Hay millones de tipos de almas, y están en la superficie del planeta ahora mismo. Algunas han evolucionado y pueden verlas, pero la gran mayoría no puede.

Así que seguirás con esta carcasa que tienes; que yo también tuve una vez. Hoy, ya no tengo cuerpo físico. Y he evolucionado lo suficiente como para ser sólo Luz. Pero cuando necesito estar contigo, me materializo. Tenemos esta propiedad de condensar nuestra energía para que puedas vernos; como si hubiéramos ganado un cuerpo. No, no tenemos cuerpo. Solo condensamos la energía para que sea menos translúcida. Eso está muy bien.

Así que sus cuerpos están cambiando. La base cristalina a la que nos referimos es una base energética. Es una base que te permitirá ser físico o no; como quieras. O a veces físico, a veces pura energía, como desees, dependerá de tu evolución; dependerá de tu camino. Este cambio tiene muchas consecuencias. Consecuencias que desequilibran vuestros cuerpos.

Muchos de ustedes piensan que están enfermando porque es un pequeño problema a la vez. Luego corren al médico, el médico no entiende qué es, y ustedes siguen notando cada día más síntomas que no tienen explicación lógica. Porque aparecen y desaparecen. Igual que vienen, desaparecen.

¿Por qué ocurre esto? Sus cuerpos absorben energía. ¿Y qué es esta energía? La Luz del Sol Central. Una luz de altísima potencia, de altísima vibración. Una luz capaz de cambiar la base de carbono a cristalino. Entonces esta Luz penetra en vuestros cuerpos y comienza a actuar. Donde el camino está despejado, donde no hay problemas físicos, esta Luz entra y no encuentra obstáculo alguno. Penetra, penetra; gradual y lentamente.

Cuando encuentra un obstáculo, tiene que detenerse, intensificar su propio poder para eliminar ese obstáculo. No puede quedarse ahí. No se da la vuelta y pasa el obstáculo; no. Ese obstáculo tiene que ser eliminado. Ahí es donde entra el dolor. Hay algo ahí que necesita ser mirado, que necesita ser tratado. Entonces te diría: presta atención a estos lugares.

A menudo, incluso podría decir en la gran mayoría de los casos, son obstáculos energéticos. Son miasmas que vuestras almas arrastran de otras vidas. Y en ese momento la Luz está diciendo: «Mira, aquí hay algo que tienes que ayudarme a destruir» Así que, si conoces alguna técnica, aplícala para que esos obstáculos empiecen a derribarse y la Luz continúe su descenso.

Recuerda que entra por tu coronaria y se dirige hacia tus pies. En este momento, la Luz está actuando principalmente sobre el torso, donde existen los mayores problemas. Los brazos y las piernas son fáciles de resolver porque no tienen órganos en su interior, pero el torso sí. Así que empiezan a aparecer algunos problemas (para ti son problemas). Algo se desequilibra aquí, una prueba totalmente fuera de lo normal allá, y te llenas de medicamentos.

Incluso entendemos que, en el contexto actual, no tienes forma de saber si se trata de una enfermedad o si es solo un desequilibrio de la Luz que entra en tu cuerpo. Y estoy de acuerdo en que, ante la duda, tomes la medicina. Así dentro de un tiempo os daréis cuenta de que se os ha pasado. Seguid cuidándoos con normalidad, como lo hacéis.

Miraos con cariño, mirad vuestros cuerpos con cariño, y sobre todo, tratad los puntos de dolor. Donde aparece el dolor, es un obstáculo, es energía estancada, es energía que necesita ser eliminada. Para que la Luz pueda continuar su camino, porque allí está estancada. Ese es el término, está atascada en ese obstáculo.

«Ah, ¿pero no tiene la Luz el poder de disolverlo?» Lo tiene. Lo tiene. Lo disolverá a su debido tiempo. Pero recuerda: si hay algo ahí que tu alma está cargando, es una energía que necesita ser tratada en el alma, necesita ser eliminada por el alma, para el alma. Para que ese sentimiento, ese dolor, sea lo que sea, desaparezca, se deshaga en algún momento del pasado, o quizás incluso en el presente. Pero no volverá a molestarte.

Así que presta atención. Cuídese. Y no dejes de tomar tu medicación. Por si acaso, siga tomándolos. ¿Un desequilibrio? Ocúpese del desequilibrio. Porque no querrás que tus cuerpos sean robots, que vuelvan a la normalidad por sí mismos. Porque la Luz seguirá trabajando, seguirá desequilibrando. Así que cuando te medicas, ayudas a tu cuerpo a afrontar ese nuevo proceso con más calma. Y poco a poco, te irás equilibrando. Llegará un momento en que la medicina ya no será necesaria, porque ese paso ya se ha dado.

Así que, hermanos míos, no os asustéis por tantas cosas que están surgiendo. Pero, por otro lado, prestad siempre atención. Preguntad al cuerpo. Ya estáis aprendiendo a trabajar con el péndulo. Así que pregunta: «Cuerpo, ¿este síntoma que estoy sintiendo es un desequilibrio del que debería ocuparme con un médico o no?» Sólo eso y espera la respuesta. Solo eso y espera la respuesta.

Si es algo como una enfermedad, te dirá que sí y tendrás que ir al médico; urgentemente. No lo dejes para mañana. Es tu salud, es tu cuerpo. Ahora, si responde «No», créeme, es un desequilibrio momentáneo, pero debes cuidarlo, debes tratarlo. Porque este desequilibrio que está siendo causado hoy por el cambio de la base de carbono a la base cristalina, si no te ocupas de él, en realidad podría ser un problema en el futuro.

Así que ahora es el momento de cuidarse. Si no tienes ninguna técnica, busca a alguien que sí la tenga. Es importante que estos síntomas se vean con cuidado, para que entiendas por qué aparecen. Espero haber sido muy claro con todos ustedes.

Para el Código de Luz de hoy, os dejo con las siguientes frases:

«Soy un alma vestida en un cuerpo físico.

Este cuerpo necesita atención y amor.

Y en este momento, me dirijo enteramente a mi cuerpo.

Y le envío todo el Amor de mi alma».

Después de estas frases, di la siguiente palabra: 

¡Ecatócitum! ¡Ecatócitum! ¡Ecatócitum!

Y recuerden, hermanos míos, el equilibrio lo es todo. Especialmente el equilibrio mental. Esto es lo que causa la mayoría de las enfermedades que tenéis. Manténganse en equilibrio. Mantengan la calma. Respirad profundamente, constantemente. Esto ayuda a cada uno de ustedes a entrar en equilibrio. A centrarse, a involucrarse con cada rayo de Luz que llega.

Traducción: Kelly Neri

Revisión:  Regiani M. Bugalho