¡Queridos hermanos del planeta Tierra! ¡SOY HILARION!
Para muchos, el camino se está volviendo cada vez más difícil. Por todo lo que hay que aprender, por todo lo que hay que vivir.
Muchos creen que se están convirtiendo en seres perfectos. Esta es una visión del ego. No es la perfección lo que buscáis. Es el camino totalmente orientado hacia el Amor y la Luz. No es la perfección. Lo importante en este momento es el sentimiento que se vive, que se emana, no lo que mostráis al mundo.
A menudo, vuestras actitudes pueden no agradar al Todo. Todo, aquí me refiero a las personas que os rodean. Muchos de ustedes sois ridiculizados, se os tacha de locos por vuestras actitudes, por vuestra forma de pensar y de actuar.
Creedme, nadie dice eso de corazón. Lo que ocurre es que muchos os miran y les gustaría sentir lo mismo, ver el mundo de la misma manera. Pero aún no pueden. Entonces intentan que volváis a su mundo, que seáis como ellos. Porque ustedes estáis ahí delante. Os habéis convertido en otra persona. Y ellos ya no conocen a ese nuevo ser en el que os habéis transformado.
Lo importante en estos momentos es no tomarse demasiado en serio lo que se les dice. No reaccionen a las energías lanzadas. En ese mismo instante, revístanse de Luz. No se dejen herir. No se dejen ofender. No se dejen menospreciar. Revístanse de Luz. Y, si es posible, no permanezcan al lado. Simplemente, demuestren que eso no les agrada. No están obligados a escuchar todo lo que les dicen.
Dejad que hablen solos. ustedes estáis en otro nivel. No os menospreciéis con sus palabras, con sus acciones. Es necesario, hermanos míos, que os volváis cada vez más inmunes a lo que venga, a lo que os rodee. Comentarios, actitudes, acciones, noticias, cualquier cosa que sintáis que tiene una energía inferior a la vuestra, no os dejéis abatir. No permitáis que os derrote.
Llénate de Luz y simplemente no escuches. No respondas, no replicas, no intentes dar lecciones. No es momento para lecciones. No, por vuestra parte. Cada uno debe tomar su propia decisión, aprender o no. Para quien quiera aprender, hay muchas fuentes. Busca. No serás tú quien enseñe. Entiéndelo.
“Ah, pero la persona está a mi lado”. No serás tú. Porque a ti no se te respeta. Ahora, de otra fuente, la persona se detendrá a escuchar. Esta es una tendencia del ser humano: menospreciar al otro, disminuir al otro, no creer en el otro. Especialmente cuando hay algún tipo de vínculo.
Es más difícil adoptar esta postura con personas desconocidas. Porque no están cerca. Entonces no hay forma de que ese ser actúe sobre ellas. Solo escuchará. Ahora tú estás ahí al lado, así que es fácil menospreciarlo. Es fácil ofenderlo. ¿Lo entienden? Hay una diferencia ahí.
Así que no seréis ustedes quienes enseñéis a nadie. Que cada uno elija el camino que quiere seguir. Que cada uno elija cómo quiere evolucionar. Es su corazón el que tiene que indicarles el camino, no ustedes.
Ahora es el momento de seguir adelante. Quien se quede atrás, se queda atrás. No dejes que nadie te impida seguir tu camino. Cada uno tiene su oportunidad de evolucionar, de avanzar. Si no avanzas, es porque no quieres. Y tú ya tomaste una decisión hace mucho tiempo.
Así que sigue tu camino. No te dejes atar por nadie. No te aferres a nadie. Y no intentes cambiar a nadie. Hagan lo que crean correcto. Si lo que hacen molesta, exijan respeto. El respeto es algo que se impone. Porque cuanto más se rebajan, más crece el otro. Así que impongan respeto. Del mismo modo que ustedes no van a interferir en la vida de los demás, que ellos no interfieran en la suya. Imponen respeto.
Esto es muy importante, hermanos míos. Muchos de ustedes bajan la cabeza, se callan y permiten que los ofendan. No lo permitan. Exijan respeto. Y no actúen al contrario, menospreciando al otro para que vea lo mucho que se sienten heridos. No, ese no es el camino del Amor Incondicional. El camino es imponer el respeto. No lo admitan.
Cuando empiecen a decir: “Cállate. No admito que me ofendas. Las decisiones son mías. No te afectan, así que no las critiques”. Y punto. Cierren el tema. ¿Entienden? Son seres poderosos. Así que impónganse como tales. No se menosprecien, porque eso es lo que el entorno intentará hacer todo el tiempo.
Nunca olviden: quien no está en el camino es susceptible de ser manipulado; está listo para ser un ser manipulable y, efectivamente, afectarlo. Entonces pónganlo en su lugar. “No interfieras en mi camino y yo no interferiré en el tuyo”; otra buena respuesta. Y respétense.
No permitan la ofensa. No permitan la menospreciación. Les puedo garantizar que esto se convertirá cada vez más en una constante. Porque ustedes están evolucionando y, con ello, molestan a quienes les rodean. Porque no pueden ver él mundo como ustedes lo ven. Y como no pueden, piensan que ustedes están equivocados. Agredan y ofenden.
Entonces ponle punto final a eso. Ponle un límite. No te quedes parado escuchando algo que no te gusta. “No interfieras en mi camino y yo no interferiré en el tuyo”. Esta es una buena frase. Aprendan a decirla. No se dejen menospreciar.
Para el Código de Luz de hoy, les dejo las siguientes frases:
“He tomado mis decisiones.
Mi camino es el resultado de ellas.
Seguiré mi camino.
Y nadie me apartará de él”.
Después de estas frases, digan la siguiente palabra:
¡Complentantinum! ¡Complentantinum! ¡Complentantinum!
Y recuerden: todo esto debe hacerse con mucho amor. No con ira, ni con rebeldía. Porque si hablan con ira y rebeldía, alimentan la energía que está llegando. Y ella crece.
Así que hablen con Amor. Hablen con una sonrisa. Hablen con cariño. Y verán inmediatamente los resultados.
Traducción: Kely Neri
Revisión: Regiani Maria Bugalho


