Mis queridos hermanos, soy Melquisedek.
No hace falta tensión, no hace falta ningún tipo de preparación especial, no hace falta agua. Solo hay que venir con el corazón. Solo hay que venir con Amor, emanado por cada uno de los que están aquí, en este momento.
Entonces, les pediría que en este momento, cada uno de ustedes, se olvide de que existe una pantalla, se olvide de que existe un celular, se olvide de que existe una computadora. No hay nada, solo hay mi voz.
Entonces, cierre los ojos, manténgase sentado, relajado, y comience a vaciar su mente. Respire profundamente cinco veces.
Esta meditación puede repetirse tantas veces como desee. No hay desplazamiento temporal. Solo existe su intención, su voluntad de emanar Amor y Luz al planeta.
Entonces, en este momento, cada uno de ustedes tenga delante de sí el Mandala. Si no tiene el Mandala, coloque ambas manos sobre el Corazón Espiritual. Quienes tengan el Mandala, colóquenlo sobre el Mandala. Coloque las manos ligeramente curvadas, no extendidas, totalmente sobre el Mandala. Y trate de colocar las manos en los extremos del círculo, como si ambas manos protegieran el círculo interno del Mandala.
¿Están todos listos?
Entonces, en este momento, vamos a comenzar efectivamente a enviar Luz y Amor al Planeta Tierra.
Cada frase que diga, tú la repetirás.
«Yo (cada uno diga su nombre), envío energía de Amor y Luz, a partir de este momento, al Planeta Tierra».
Visualiza en tu mente que entre tus manos está el planeta Tierra sobre el mandala.
Está girando y sus manos están alrededor del planeta, sin tocarlo, solo alrededor. Sienta la energía del planeta entre sus manos.
Repita conmigo:
Envío amor y luz a cada gobernante de cada país de este planeta.
Envío amor y luz a todos mis hermanos del planeta, sin excepción.
Envío amor y luz a todos los animales del planeta, sin excepción.
Envío amor y luz a las aguas del planeta, tanto dulces como saladas.
Envío Amor y Luz a los bosques, a los campos, a las montañas del planeta.
Envío Amor y Luz al aire que respiro, que es el mismo en todo el planeta.
Envío Amor y Luz a las entrañas del planeta, al fuego que arde en el centro de la Tierra.
Envío amor y luz a todos aquellos que me han hecho daño.
Envío amor y luz a todos aquellos que han atentado contra mí.
Envío amor y luz a cada uno de aquellos a quienes no consigo perdonar.
Envío amor y luz a todos aquellos a quienes pido perdón.
Y envío Amor y Luz a mi camino, a mi alma, a todo lo que he vivido en este planeta.
En este momento, millones de Seres de Luz están expandiendo la energía generada por ustedes y transformándola en poder de destrucción de las egrégoras de baja vibración.
Los dos portales del Amor de este planeta, uno en Europa y otro aquí en Brasil, se expanden, cubriendo todo el planeta, trayendo oleadas de Luz, Amor y evolución.
Cada uno de ustedes es responsable de este proceso. Cada uno de ustedes será responsable del ascenso del planeta, ya que este movimiento, iniciado hoy, acelerará todo el proceso.
¡Estaban viajando en carretas; hoy, la velocidad de la ascensión aumenta a un avión, porque así está escrito, porque así es, porque así será!
Agradezco a cada uno de los que han participado aquí esta noche y tengan por seguro que la energía emanada por cada uno de ustedes tiene nombre y marca, y el Universo reconocerá en cualquier momento cada energía emanada aquí hoy.
Y tengan por seguro que la recompensa llegará, no importa de qué forma, pero llegará.
Que cada uno, ahora, coloque sus manos abiertas sobre la Tabla, cerrando así la emanación de Luz y Amor.
Gracias, hermanos. Tengan por seguro que están haciendo mucho por el planeta y por sus hermanos, créanlo.
Que cada uno haga su parte, pero siempre con el corazón, con el pecho abierto, sin reservas, sin cuestionamientos. Observen todo lo que se ha dicho durante la meditación, y si algo les ha molestado, si algo ha cerrado su corazón, no participen más o traten ese sentimiento.
Es necesario que solo se emanen Amor y Luz, porque cualquier otro sentimiento también se multiplica y eso no lo podemos permitir.
Ten por seguro que, de alguna manera, serás sacado de este proceso hasta que seas capaz de emanar solo Amor y Luz. No se permitirá ningún otro sentimiento.
Si alguien siente mucha energía, se siente mal, aterrícese en Gaia y pídale que equilibre su cuerpo energéticamente y todo se drenará hacia Gaia.
Traducción: Regiani Maria Bugalho
Revisión: Ana Maria Souza


