¡Queridos hermanos del planeta Tierra! ¡SOY KUTHUMI!
El aprendizaje, hermanos míos, nunca termina. Cada día reciben una nueva orientación. Y esta orientación puede llegar de cualquier forma: en un sueño, alguien que les dice algo y les hace tomar conciencia, un libro que leen, un curso que deciden hacer. Hay muchas formas de acceder al aprendizaje.
¿Pero qué es lo más importante? Es la práctica, es la experiencia. Cada conciencia que llega, cada sabiduría adquirida, debe actuar eficazmente en el camino. Es necesario que tu conciencia «encaje» lo aprendido en tus hábitos, costumbres, forma de pensar, forma de actuar, forma de hablar.
El aprendizaje no se puede olvidar. Muchas veces se ha dicho aquí que no hay que dejar las técnicas en el cajón, el aprendizaje en el cajón. Entonces muchos se asustan, porque han hecho tantas… ¿Cómo las aplicaría todas? Entonces comprenda que necesita vivir cada una de ellas; cada técnica, cada aprendizaje. No se trata de utilizarlas íntegramente, cada una de ellas; se trata de vivir desde la perspectiva que le han aportado.
Es importante revisar y releer muchas veces, pero con otra visión, otra conciencia, porque cada vez la comprensión será diferente. Porque la Luz en ustedes será diferente, dependiendo del camino recorrido. A muchos les gusta acumular cursos, experiencias, vivencias; y todas están ahí, en el cajón. Pocas se viven y se aprenden realmente.
Puede que muchas veces no recuerdes lo que se dijo, pero la experiencia está en ti. La Luz adquirida está en ti. Así que si al menos practicas la sabiduría existente en cada curso, ya estás ganando mucho. No necesitas recordar todo el curso en tu mente; no necesitas recordar cada palabra dicha. Lo que necesitas es vivir de acuerdo con lo que has aprendido y, sobre todo, dejarte envolver por la energía que te ha aportado.
Yo diría que lo interesante, para aquellos que no tienen interés en practicar en los demás, es practicar en uno mismo. Una vez al día, una vez cada dos días, no importa la frecuencia; porque cada vez que miras una técnica y la utilizas, utilizas la energía en ti mismo, estás ganando mucho. Te estás curando, iluminando. Y muchas veces, diría que solo necesitarías esa energía para resolver algo, ese día, en ese momento.
Entonces, sean conscientes de todo lo que ya han hecho. Hagan un guion de cada uno. «¿Qué necesito para tener acceso a esta energía?». Ténganlo a mano. No es necesario buscar el material del curso; tengan a mano solo lo necesario para tener acceso, para usar la energía. Y cada día, usen una diferente o, dentro del tiempo que deseen, vayan usándolas una por una. ¿Han completado todas? Vuelvan a empezar la misma secuencia.
Hermanos míos, hay algo muy importante en todo esto: cuanto más se tratan bien, más se elevan, y también elevan al planeta. Así que también están ayudando a sus hermanos, porque cuanto más Luz emanan, más Luz reciben ellos. No se vean pequeños, porque todos están conectados.
Entonces, una pequeña chispa de Luz que sale de ti, reverbera hacia el Todo. Entonces ha llegado el momento de la acción, no solo de la sabiduría. Es necesario actuar. Actuar con lo que se ha aprendido. Que sea en ti mismo; ya estarás haciendo algo.
Míralo con amor. Repasa tu trayectoria. Vuelve atrás, al primer curso que hiciste. ¿Qué te aportó? ¿Qué te enseñó? ¿Vale la pena releerlo todo? Si vale la pena, hazlo, porque lo leerás con otros ojos, con ojos más elevados, más evolucionados. Y te garantizo que aprenderás mucho más.
La sabiduría no ocupa espacio. Cuanto más aprenden, más iluminados se vuelven. A veces, una pequeña frase dicha en un curso marca una gran diferencia en su camino. Así que, manos a la obra. Comiencen a tomar conciencia de lo que ya han hecho, de todo el camino recorrido.
Y, si es posible, difundan esto entre sus hermanos. Conviértanse en terapeutas. Formen pequeños grupos, grupos físicos, pequeños, en los que todos puedan compartir esa energía. Un momento de reflexión, un momento de interiorización, de un pequeño grupo. Les aseguro, hermanos míos, que estarán haciendo mucho por el planeta.
¿Y se puede hacer a distancia? Sí, se puede. Creen pequeños grupos de acción, en los que se reúnan en un momento determinado, y uno emane energía para el grupo. No hace falta mucho tiempo. No es el tiempo lo que hace que la energía actúe. Porque el tiempo no existe. Lo que hace que la energía actúe es quien la recibe. Ustedes solo serán un canal. Quien la reciba será quien defina el tiempo que la energía actuará.
Entonces pueden ser hasta 5 minutos; y eso será suficiente, porque las energías son de Luz, son inteligentes; y saben cuánto tiempo deben actuar. Promuevan esto. ¿Quién sabe si no se convertirán en profesionales? ¿Quién sabe si esto no les traería un alivio financiero? Piénsenlo bien. No se necesita mucho. Solo unos minutos, acordado, donde todos estarán allí recibiendo.
¿Como terapeuta? Entonces actúa como sea necesario. Pero mirad vuestro camino. Volved a recorrerlo, pero con otros ojos. Porque hoy estáis mucho más evolucionados. Y estoy seguro de que leeréis muchas cosas que os harán cambiar rápidamente.
Para el Código de Luz de hoy, dejo las siguientes frases:
«El aprendizaje no se acumula. Solo se expande.
La sabiduría no ocupa espacio. Expande la conciencia.
Entonces, tengo que mirar todo lo que he aprendido,
con amor, y vivir cada enseñanza.
Después de estas frases, diga la siguiente palabra:
¡Sabitólium! ¡Sabitólium! ¡Sabitólium!
Y no hay plazo, hermanos míos. Cada uno lo haga a su ritmo. El aprendizaje no es igual para todos. Apóyense en los estudios. ¿Crear grupos de estudio? Muy interesante. Es una forma de intercambiar ideas, sugerencias y seguir evolucionando. Siempre.
Traducción: Regiani Maria Bugalho
Revisión: Ana Maria Souza
