Queridos hijos e hijas del planeta Tierra ¡SOY MARÍA!
Cuánta alegría en mi corazón, cuánto esplendor, cuánta luz tienen algunos hijos en el planeta. Pero la verdad es que no contamos unidades como tú. Si un ser humano con mucha Luz, con mucho Amor en su corazón, es suficiente para emanar Luz para el resto, y esta Luz reverbera por todo el planeta, ¿por qué necesitamos tantos? Lo que cuenta es la intención del corazón. Si un hijo o hija interioriza, se coloca abierto a las energías de la Luz, y se imagina: “Voy a envolver el planeta en una burbuja de Luz Rosa, y esta burbuja emanará mucha Luz al planeta. ¿Funcionará esto?” Así que te digo: ¿cuál era tu sentimiento, cuál era tu intención? ¿Fue la intención de llenar Gaia con todo su Amor? ¿Fue para envolver el planeta en una burbuja de Luz Rosa de puro Amor, como si el planeta fuera una bolita? ¿Era esta su intención?
Así que esa pequeña burbuja que era muy pequeña para ti era inmensa para Gaia, porque tu corazón la hizo crecer, tu corazón envolvió este gigantesco planeta. Hijos e hijas, confiad en el poder que tenéis. La intención es mágica. Se transforma, aumenta, disminuye, según lo que imagines. Así que si te sitúas fuera del planeta, lo miras desde lejos como una bolita, será una bolita con relación a ti y podrás hacer con el planeta lo que quieras.
Desgraciadamente, esto también ocurre con los sentimientos negativos. Pero claro, hay una gran diferencia, que quizás ahí está el gran secreto que os voy a contar; ya no será un secreto, sino que será nuestro secreto, no lo difundáis porque a algunos de los que lo escuchéis puede que no os guste, pero os lo voy a contar.
Cuando tú… diminuto como eres, sí, no podemos negarlo, eres diminuto con relación al planeta, eres un puntito de arena, quizás no tan diminuto; pero si llenas tu pequeño corazón de Amor, de Luz y pides: “Voy a envolver el planeta en una gran bola de Luz, con mucho, mucho Amor, con todo mi Amor. ¿Qué ocurre? Te diré: todos los Ángeles escuchan tu oración, y estos Ángeles nos dicen rápidamente su intención. Y entonces nosotros, en un gran coro, en un gran grupo, hacemos que se produzca su burbuja de Luz y Amor. Ella cubre efectivamente todo el planeta, transmite efectivamente su Amor que ahora ya no es minúsculo, es inmenso para Gaia y ella es extremadamente feliz con este gesto. Este es el gran secreto.
Muchos se preguntarán, ¿por qué no se evita el mal en el planeta? Porque no podemos cambiar sus intenciones. Ahora piensa conmigo: Alguien más tiene la misma intención de cubrir el planeta, pero con algo muy malo, con algo devastador, con algo que traerá sufrimiento a todos; los Ángeles nos dicen. ¿Y qué hacemos? ¿Magnificamos ese mal? Por supuesto que no, actuamos para equilibrar todo ese mal, pero no podemos detenerlo porque es el resultado de sus decisiones. Por lo tanto, hay que dejar que repercuta y que pase por el resultado de sus acciones.
Pero no estamos aquí para hablar del mal, quiero seguir hablando de las buenas acciones, de los buenos momentos. Quiero seguir diciéndoles, lo que sucede con cada sentimiento positivo que ustedes hacen, son poderosos mis hijos e hijas. Eres pequeño, sí, lo eres. Pero si tu intención es enorme, es profunda, es verdadera, ahí estamos haciéndola inmensa y cumpliendo tu deseo.
Oh, hijos míos, no estáis al tanto de todo lo que ocurre en el universo. Poco a poco vas aprendiendo a entender cómo funciona todo. Así que, una vez más, te digo que no pienses que eres pequeño, que no pienses que eres impotente, que no pienses que estás aislado, porque un pensamiento, una intención, puede cambiarlo todo. Porque ahí están los Ángeles, ahí estamos nosotros, con un solo pensamiento amplificando todo el planeta.
Coraje, ¿hagamos un momento de pensamiento positivo por el planeta? No, no hay que reunirse para que todos piensen al mismo tiempo. Puedes pensar cada segundo, puedes mirar al sol y agradecer esa energía, puedes mirar un vaso de agua y agradecer a Gaia por saciar tu sed. Este sentimiento de gratitud, simplemente, lo proyectamos a Gaia y ella nos devuelve el agradecimiento. ¿Cómo? No importa, lo recuperarás porque emanaste un poderoso sentimiento que es la gratitud.
Así que agradece por la comida, por el aire, por el agua, por el techo, por poder caminar o no, agradece por estar vivo y vivir toda esta experiencia. Así que ahora ya sabes el secreto, estamos aquí para aumentar todo lo bueno que piensas. Así que piensa, sueña. Soñar es maravilloso porque te entregas a ese momento y creas muchas cosas hermosas. Y todo eso lo transmitimos y reverbera por todo el planeta, creando nuevas situaciones, creando nuevos futuros. No olvidéis nunca, mis hijos e hijas, que el más allá, el mañana, el futuro, se construye con lo que pensáis hoy.
Así que piensa en cosas maravillosas, en cosas buenas y estarás construyendo un hermoso futuro. No te dejes llevar por las muchas cosas malas que están apareciendo, se están mostrando porque son la verdad. Y la verdad necesita ser vista, necesita ser vivida. Pero no te apegues a ella. Lo importante es que mires todo con Amor, comprendiendo que todo es verdadero y sobre todo, emanando muchas cosas hermosas, muchos sueños, muchos buenos sentimientos. Y nosotros estaremos ahí, esperando ese momento para potenciar todo.
No eres pequeño. Eres una pequeña partícula, sí, debo estar de acuerdo, pero tu intención, tu corazón, es lo que manda en este planeta. Y si emana Amor, si emana gratitud, ten por seguro que estás haciendo mucho por ti, por el planeta y por todos los que lo habitan. Creedme, hijos e hijas, tenéis más poder de lo que podéis imaginar.
