¡Queridos hijos e hijas del planeta Tierra! ¡YO SOY MARÍA!
He venido a traerles mi manto una vez más; un manto de Luz y Amor.
No temáis nada, hijos míos.
El camino puede parecer difícil. A menudo incluso insuperable. Pero las fuerzas del Amor y del corazón son capaces de superarlo todo.
No temas nada.
Elévate. Siente la alegría de estar vivo. Siente la alegría de participar en este momento.
No temas nada.
El camino de cada alma presente en este planeta en este momento es un arduo camino de evolución y limpieza. Pero es un camino necesario, para que podáis llegar a donde necesitáis estar; donde habéis elegido estar.
No temas nada.
Miren todo con amor. Miradlo todo con humildad. No dejéis que la ira y el miedo envuelvan vuestros corazones. Tened siempre un corazón iluminado, pase lo que pase.
No temas nada.
No dejes que la ira, la violencia, el miedo te posean. Mira todo con Amor. Incluso en los momentos más difíciles, mira con Amor. No dejes que tus pensamientos vaguen por la zona oscura. Llévalos siempre a la zona iluminada. No te dejes sacudir por nada. No te dejes atrapar por el sufrimiento de los demás. Si es tu sufrimiento, comprende y date cuenta de que es un punto de evolución y que solo depende de ti cómo lo mires. Para que se convierta en un salto en tu camino.
No temas nada.
Todo puede parecer difícil e incluso imposible. Pero si confías y crees intensamente, desde el fondo de tu corazón, todo es posible. Es tiempo de creación. Es tiempo de transformación. Crea nuevos momentos y tendrás nuevos futuros.
Nada teman.
Vive cada momento intensamente, con amor. No tengas miedo de lo que pueda haber al otro lado de la curva. Lo que hay es lo que ha trazado tu alma. Y seguirás tu camino; intenso pero amoroso. Ciertamente en el camino de la evolución.
No temas nada.
Estamos a solo un pensamiento de distancia. Estamos dentro de cada uno de ustedes. Llámanos tantas veces como necesites. Siempre estamos a un pensamiento de distancia.
Traducción: Rita Silvana Monteiro
Revisión: Regiani M. Bugalho