Esta meditación se puede hacer acostado o sentado, como desees.
Solo ponte de una manera cómoda.
Respira hondo una Luz Verde.
Inspira esta Luz Verde, y cuando exhales deja salir todo lo que te molesta en este momento.
Inspira de nuevo, y al exhalar saca tus dudas, tus miedos.
Respira la Luz Verde de nuevo y al ponerlo fuera, deja salir todo el cansancio, todo el desánimo, que todavía pueda existir.
Y sigue respirando esta Luz Verde normalmente. Ahora mismo te llevan a una cámara. Es una cámara enorme, un lugar vacío, enorme. No tengas miedo. No intentes configurar este lugar, solamente siente la energía del mismo. No tiene una forma definida en su mundo.
Cada uno de ustedes podrá verlo de una manera diferente. Para aquellos que están sentados en el mundo físico, véanse a sí mismos en ese momento acostado en esta cámara. Buscar. Aparecerán luces verdes en forma de remolino en esta cámara, como si tuvieran vida propia. Y estas luces giran en círculos por toda la cámara.
Cierra los ojos.
Cada una de estas luces penetrará en sus cuerpos. No, nada que sientas de dolor o cualquier tipo de molestia.
Siente la energía de estas luces, caminando dentro de sus cuerpos. Estas luces actuarán sanando cada punto que se haya limpiado de tu cuerpo, rellenando los espacios vacíos que quedaban después de la limpieza.
Permanezca en este estado durante cinco minutos.
Ahora cada una de estas luces comenzará a salir de tu cuerpo.
Abre los ojos. Verás que estas luces formarán un símbolo encima. Observe cuidadosamente el símbolo formado por la unión de estas luces. Es un símbolo muy conocido.
Cada uno recibirá un símbolo diferente. Así que presta atención a lo que estás viendo. Este símbolo debes guardarlo en tus mentes o dibujarlo para que no lo olvides; y en momentos de desequilibrio puro y absoluto, mira este símbolo; verlo brillar en tono verde y solo míralo durante 1 minuto; y se abordará cualquier desequilibrio.
Es un regalo que te dejo en esta caminada.
Ahora el símbolo se encierra en la parte superior de la cámara.
Vuelve a cerrar los ojos. Serás llevado a un río. No, es un río calmo, muy tranquilo.
Abre los ojos ahora y estarás flotando tranquilamente en las aguas de un río. Escucha el sonido de las aguas golpeando las orillas. Déjate hundir en estas aguas. Para aquellos que tienen dificultades para meterse en las aguas, no tengan miedo, nada les afectará, pero si no tienen éxito, simplemente sigan flotando.
Volver a la superficie. Este baño, agradable, es para sellar todo el proceso que se realizó durante esta caminada, vigorizando sus cuerpos, sus células, y aportando mucha, mucha Luz a tu caminar. Reflote..
Vuelve a cerrar los ojos.
Respira esa Luz Verde de nuevo.
Y a medida que abras los ojos de nuevo, volverás a tu mundo físico y a tu conciencia.
