¡Queridos hermanos y hermanas del planeta Tierra! ¡YO SOY METATRÓN!
Os envuelvo a todos y cada uno de ustedes en mi cubo etérico. Puedo decir que coloco este hermoso planeta dentro de un gran cubo, para que toda la energía llegue a cada uno de ustedes de forma idéntica y fuerte.
Sean rocas. Sean fortalezas. Sean castillos. Sé la representación de fuerza que quieras. Ahora es el momento de mirarte a ti mismo, pero también de protegerte. Ponte tu armadura de Luz. Protégete con las energías que conoces.
Si nunca te has acercado a ninguna técnica, creo que tienes tus maestros, o tus santos, o tus guías espirituales. No importa de qué tipo sean. Importa en quién crees. Entonces este ser o estos seres serán tu protección. Haz una oración, una petición, una mentalización, una meditación, no importa lo que hagas; pero acércalos a ti. Esta será tu protección.
Ahora, recuerda siempre: La protección de quien sea, para estar activa a tu alrededor, necesitas vibrar Luz, necesitas vibrar buenos pensamientos, necesitas vibrar Amor. De lo contrario, lo que emanas de baja vibración simplemente nos alejará. Y entonces estarás desprotegido.
Así que no basta con crear tu armadura, crear tus protecciones y pasarte el día actuando como si no fueras un ser de Luz. Porque no servirán de nada. Tenéis que ser realmente seres de Luz; emanar Luz, emanar Amor, emanar gratitud, comprensión, no juzgar, no juzgar. Para que podamos permanecer a vuestro alrededor. Seamos quienes seamos.
Comprende, cuanta más Luz emanas, más Luz atraes; más equilibrado te vuelves. Tus caminos se iluminan cada vez más. De lo contrario, todo se invierte. Así que no pienses que todo lo que tienes que hacer es hacer una sola petición y hacer lo que quieras todo el tiempo y pensar que estamos ahí, protegiéndote. No es así.
Como hemos dicho una y otra vez, ahora es el momento de prestar atención. Es el momento de la interiorización. Es el momento de estar muy, muy tranquilo. Y centrado esencialmente en ti mismo. Los problemas existen para todos. Las lecciones están ahí, bailando delante de ti. Depende de ti vestirte de Amor. Depende de ti vestirte de Luz.
Y cuando mires estas lecciones, parecerán pequeños insectos, arrastrándose por el suelo. No, no es para matarlos. Ese no puede ser el sentimiento. Solo mira lo que se arrastra por el suelo con Amor. Con gratitud por haber transformado algo tan complejo en algo tan pequeño. Ese es el resultado. Y si miras más de cerca Si sigues mirando el problema con Amor, como por arte de magia desaparecerá, desaparecerá de tu vista. Y esa será la señal de que nada en esa lección te ha hecho abandonar el camino, que es emanar Amor.
No es un ejercicio fácil, pero así es como se superan los problemas. Tienes que mirarlos a todos a través de una inmensa lente de Amor. Para que se conviertan en esta cosa en el suelo; pequeña, totalmente vulnerable, para que puedas eliminarlos. Pero con Amor. Cualquier otro sentimiento hará que eso…, eso que se generó, vuelva a ser el problema. A veces incluso más grande de lo que era.
Así que tienes que ser capaz de crear esta lente de Amor, siempre. Y mirar cada problema con Amor, con humildad. La humildad de querer aprender dónde está la lección. La humildad de darte cuenta de que estás equivocado, de que has cometido errores o de que sigues cometiéndolos. Pero mirándolo todo con Amor, lo convertirás en algo pequeño y fácil.
Es solamente una forma metafórica de decirlo. Pero lo que importa ahora es que siempre emanes Amor. Quieres vivir el Amor Incondicional. Así que las pruebas están ahí para eso. Para que puedas sentir y darte cuenta de lo que es vivir el Amor Incondicional.
Sé Luz, sé Amor. Y estarás listo para vivir este Amor Incondicional. Pero cualquier otro sentimiento que se interponga te detendrá. Así que todo es un gran ejercicio. Todo es repetición. Intentos. Pero con Amor funcionarán. Inténtalo.
Pon una gran lente de Amor delante de tus ojos y míralo todo con Amor. Y ve todos tus problemas reducidos a algo pequeño y fácil de eliminar, con Amor. Haz la prueba. Haz esta prueba. Y si lo consigues, verás que, poco a poco, irás mirándolo todo con Amor. Ya nada te desequilibrará. Nada más te afectará.
Porque esa lente del Amor se volverá cada vez más fina, cada vez más frágil, para que en el futuro veas con tus propios ojos, todo con Amor.
Traducción: Kelly Neri
Revisión: Regiani M. Bugalho
