¡Queridos! ¡YO SOY EL ARCÁNGEL MIGUEL!
Hoy tendremos nuestro momento de envío de Luz al planeta Tierra. Espero que cada uno de ustedes esté presente en ese momento, pero en el corazón y en el alma. No solo físicamente presentes.
Muchos de ustedes estáis pensando: «¿Pero por qué tan poco tiempo? ¿Por qué no más tiempo?» 5 minutos no es un límite. 5 minutos es un tiempo mínimo. Así que cada uno siga su corazón. Quien quiera donar más tiempo, que lo haga. ¿Y qué es importante mientras donas este tiempo a Gaia?
No es solo poner la mano sobre el papel y dejar que la energía salga. Tiene que haber una intención para que sea multiplicada por el código de luz. Por supuesto, aquellos que simplemente pusieron su mano en el papel y donaron su energía, la energía se amplifica y cumplió su función. Pero tú puedes hacer más. Tienes la capacidad y el poder de hacer más. Pero todo debe hacerse desde el corazón y con amor.
Así que, en esos cinco minutos. Mentalizar de que todos los incendios que están destruyendo vuestros bosques y selvas están siendo apagados. No importa cómo. Lo que importa es que veas el fuego apagado. Porque si empiezas a pensar en que llueve demasiado, podrías causar más tragedias.
Así que no te preocupes por cómo o cuándo. Simplemente, ve cómo se apaga el fuego, cómo se extingue desde la superficie. Ved la tierra recuperándose, brotando de nuevo, produciendo semillas, produciendo árboles. Entonces cread un ciclo en vuestras mentes de regeneración del planeta. Esto será magnífico, porque dará a Gaia la fuerza que necesita para actuar exactamente de esta manera.
Tenéis que tener mucho cuidado, hermanos míos, con lo que pensáis, porque sois seres poderosos. Pero aquellos de ustedes que ya han pensado en la lluvia, no hay problema, no se sientan culpables de nada. La orientación está siendo dada porque hoy, el volumen de personas que estarán actuando será muy grande. Y ustedes serán parte de este proceso.
Así que hoy no llueve. Para los que estéis escuchando este vídeo, haced exactamente lo que os he ordenado. Vean como el fuego se apaga y la tierra se vuelve fértil y abundante de nuevo. Así es como se rompe este ciclo. Así es como se domina lo que está sucediendo. Y no, no voy a dirigir, porque esto es algo que tiene que venir del corazón. Por eso todo se hizo como se hizo. Para que cada uno pueda dar un poco de sí mismo.
Pero sobre todo, para participar en todo este proceso. Para que todos vean que pueden formar parte de él. Y que pueden seguir donando su energía todo el tiempo. Esto se fomentará. Que siempre vean al planeta floreciendo, produciendo, con mucha comida, muchos vegetales. Para romper este ciclo de miedo, este ciclo de temor que se está implantando en algunas regiones. Y para evitar que ocurra algo más grave en el futuro.
Mis hermanos y hermanas, ustedes que sois conscientes de todo lo que está sucediendo hoy, debéis hacer vuestra parte correctamente. Y donad, donad energía, durante todo el tiempo que queráis. A partir de hoy, podéis donar cualquier energía, incluida la energía curativa. Donad las energías curativas que tengáis. Y siempre vean a la tierra sanándose a sí misma. No uses la lluvia. Siempre vean a la tierra sanándose a sí misma. Limpiándose de hollín, de cenizas, y renaciendo como un fénix.
Recuerda: el fénix renace de sus cenizas. Y así Gaia se recuperará. Con cada uno de ustedes como instrumento en este camino, en este proceso. ¿Quieres ayudar al planeta? Entonces que cada uno haga lo que sabe hacer. Y si no tenéis ninguna técnica, seguid donando vuestra energía durante cinco minutos. No des mucho más que eso, porque es tu energía.
Pero lo importante, es ver siempre la regeneración. No es eliminar el fuego. Es necesario que ustedes vean la regeneración de la tierra. El resurgir de las cenizas. La transformación de algo negativo en el ciclo de la vida, en el ciclo de la energía, en el ciclo de la Luz.
Estemos juntos esta noche. Haremos una gran meditación por el planeta. Pero no en esos 5 minutos. Los 5 minutos serán para el Todo. Para todos los que sentirán los corazones tocados por el mensaje puedan actuar. Pero estén listos, porque haremos un gran movimiento hoy. Y esto será importante para el resurgimiento, para la recuperación, para la sanación, de todos estos puntos que están procurando destruir el planeta.
La Luz es más fuerte. El amor es más fuerte. E nada vencerá la Luz.
Traducción: Bernadete Maria Marafon
Revisión: Regiani Maria Bugalho