¡Queridos hermanos del planeta Tierra! ¡SOY KALIGHAL, comandante de la nave Pleyadiana!
¡Hermanos míos, qué alegría! Falta muy poco para que podamos reunirnos y yo pueda presentarme ante ustedes.
Ah, mi armario ya está bien ordenado. Cada día una camisa diferente. Ah, hermanos míos, sé que les gusta mucho mi forma de ser un poco más juguetona. Pero siempre he sido así. Soy serio cuando es necesario, pero si puedo ser un poco más ligero, siempre lo soy.
El momento se acerca, hermanos míos. Y veo en el corazón de todos la confianza, la amistad, incluso sin conocerme. Muchos sienten profundos sentimientos hacia mí. Así que hoy voy a dar una pequeña explicación.
Algunos de ustedes tienen contacto conmigo, me ven, hablan conmigo. ¿Y por qué? ¿Por qué establezco este contacto con ustedes? Entonces debo explicar lo siguiente: muchos de ustedes, que hoy están aquí escuchándome, ya han formado parte de caminos conmigo.
Soy comandante desde hace mucho tiempo. No voy a decir aquí cuánto tiempo, porque eso no es relevante. Pero ya hemos participado juntos en muchas acciones del universo. Como ya les he dicho, no participo en las batallas en sí, pero siempre estoy en la planificación, en la coordinación, como un gran consejero táctico de las acciones que se van a llevar a cabo.
Y muchos de ustedes ya han formado parte de mi ejército, ya han formado parte de estos momentos. Muchos son comandantes de sus propias naves. Sí, no hay un solo comandante. No tenemos esa necesidad de demostrar poder como ustedes en la Tierra, al contrario, trabajamos juntos, siempre. Y eso es precisamente lo que nos da la victoria, porque todos trabajan por el Todo, todos luchan por el Todo, no por sí mismos, no por la gloria personal.
Algunos de ustedes fueron comandantes en muchas acciones junto a mí. Muchos aún están a mi lado. Sus almas están aquí conmigo, en este momento. Un día recordarán efectivamente quiénes son y por qué están ahí. Y no piensen que, al evolucionar, habrá conflicto con los seres que ya existen en la Quinta Dimensión.
Todo está muy bien hecho por Dios Padre/Madre. Así que muchos de ustedes están siendo preparados ahora para elevarse e ir a dimensiones más altas. Todo es aún muy complejo para que lo comprendan. Sus almas están en todo el universo. Cada fractal en un lugar. No se preocupen por chocar con la otra parte de su alma. Esto no es imposible y puede suceder. Y no pasará nada malo.
Pero volviendo a nuestras misiones. Entonces, conozco a algunos de ustedes desde hace mucho tiempo. Por eso, muchos me ven, muchos tienen contacto conmigo, porque están aquí, cerca de mí, trabajando conmigo. Son parte de las almas que están aquí. O mejor dicho, para explicarlo mejor: son parte de la misma alma cuyo fractal también está aquí trabajando conmigo. Así es más correcto. Porque, en realidad, no estoy trabajando con el alma. Es con uno de los fractales de vuestra alma que está aquí en la Quinta Dimensión a mi lado.
Así que conozco a cada uno de ustedes.
Hermanos míos, regocijaos. No consideréis los desafíos como algo complejo y difícil. Cada desafío es un peldaño que suben en la escala evolutiva. Les voy a contar un secreto. Antes de evolucionar a la Quinta Dimensión, yo era muy rebelde. Rebelde en el sentido de no acatar lo que me enseñaban. Siempre quise hacer las cosas a mi manera, a mi modo. Y voy a ser muy franco, tardé mucho en ascender, mucho.
Porque tal y como yo pensaba que era, nunca era suficiente para mi evolución. En lugar de elevarme, me dejaba abatir por mi ego. Me creía superior, pensaba que podía definir el camino que me llevaría a la evolución. Y nunca sucedía. Hasta que me di cuenta de que estaba tomando un camino equivocado, que todo lo que me enseñaban era lo correcto, lo necesario para mi evolución. Y empecé a cambiar, a dejarme envolver por todo el proceso, correcto, que me enseñaban.
No diré que fue rápido. Pasé mucho tiempo en la Tercera Dimensión. Pero, poco a poco, fui aprendiendo y evolucionando. Por eso les digo: todo lo que se les dice y enseña es correcto y necesario. No intenten encontrar caminos alternativos para llegar al mismo punto, porque ningún camino los llevará a la ascensión, a diferencia del camino que se les enseña. Son solo atajos que los alejan del camino correcto.
¿Es difícil? Es difícil. ¿Hay que renunciar a muchas cosas? Sí, hay que hacerlo. ¿Hay que cambiar internamente? Sí, hay que hacerlo. Pero puedo decirles lo siguiente: (por experiencia propia), me arrepiento de todo el tiempo que perdí intentando hacerlo a mi manera. Porque la Quinta Dimensión, en relación con la Tercera, no tiene explicación. Es simplemente un mundo de sueños. El mundo de los sueños que imaginan. Donde nada, efectivamente nada, los ataca, los agrede, los menosprecia, los molesta.
Entonces, hermanos míos, si me permiten darles un pequeño consejo: hay un río, y este río tiene un caudal, tiene un camino, una dirección. El río nunca regresa. Solo avanza hasta llegar al mar. Así que contemplen el río como su camino y el mar como la Quinta Dimensión. Entonces, entren en ese río, no opongan resistencia, déjense llevar por él.
¿Habrá momentos más intensos? Sí, los habrá. ¿Habrá momentos en los que querrán salir del río? Los habrá. Pero nunca salgan del todo del río. Entréguense al camino. Porque el camino mismo, el río, los llevará a donde sea necesario. No se dejen encantar por lo que hay en las orillas, por aquellos que los llaman. “No, no te vayas. ¡Quédate!”.
¿Quedarse? ¿Para qué? ¿Para seguir viviendo en la Tercera Dimensión? ¿Sufriendo? ¿En la dualidad? ¿Cuál es la ventaja? ¿Es difícil dejarse llevar por el río? A veces sí. A veces hay tramos intensos. Pero cuanto más se entreguen, más agradable y tranquilo se vuelve el río. Cuanto más se resistan, cuanto más luchen contra él, más voluminoso y difícil de recorrer se vuelve el río. ¡Entréguense! Dejen que la Luz los guíe por el río. No se arrepentirán, se lo garantizo.
Y sí, seguiremos ampliando nuestro libro de recetas, que ya es bastante extenso. Y nos aseguraremos de compartirlas con ustedes, porque es una mezcla de lo que hay aquí con lo que hay allá, que seguirá existiendo aquí después de la ascensión. Desafortunadamente, no tendrán todo en la Quinta Dimensión, principalmente dos ingredientes que usan para casi todo y que nos permiten preparar algunas recetas que tienen hoy, sin ellos: el azúcar y la harina. Eso no lo tendrán aquí.
El sabor dulce tiene un complejo mecanismo para envolverlos, sacarlos de su equilibrio. No es un sabor saludable. Les causa muchas ilusiones. Por eso, se introdujo muy bien en sus dietas, para que tengan el comportamiento que tienen hoy. Nada de eso habrá aquí.
No digo con esto que ya no tendrán nada dulce, porque muchas frutas son extremadamente dulces. Pero esta sustancia no existirá, bajo ninguna circunstancia. La caña de azúcar se utilizará para otros fines. No, tampoco tendrán cachaça aquí. Se utilizará para otros fines.
Sí, hermanos míos. No, no nos hemos vuelto religiosos ni mojigatos, que no podemos hacer nada. Podemos. Aquí hay bebidas que estoy seguro de que les gustarán mucho, que son extremadamente agradables, pero que no contienen alcohol. Este momento no existirá aquí. Pero sabemos vivir. Sabemos celebrar. Y quedarán encantados con la diversidad de bebidas que existen en el universo. No solo en su planeta, sino en el universo.
Así que, hermanos míos, usen esa curiosidad, ese deseo de conocer que tienen ahora, para lanzarse inmediatamente al río y dejarse llevar. Les aseguro que no se arrepentirán. Es un poco difícil, lo reconozco. Yo pasé por todo eso, ¿Recuerdan? Y no he contado ni una décima parte de la historia. Yo era realmente terrible. Pero lo logré. Después de mucho intentarlo.
Entonces no quiero que eso les pase a ustedes. Ahora tienen la oportunidad. No la desperdicien. No querrán perderse la fiesta que estamos preparando para ustedes. Estamos con ustedes todo el tiempo.
Nuestra ropa y nuestros uniformes están impecables. ¡Ah! Les enseñaremos muchas cosas. En su mundo, tienen la costumbre de ir bien planchados, con la ropa planchada. Aquí, los tejidos no necesitan plancharse. Muchos dirán en este momento: “¡Qué maravilla!”. Todo tiene su propósito. La ropa no se lava, porque no utilizamos el agua del planeta para tal fin. Se somete a un proceso de nanopartículas en el que se limpia y esteriliza. Pero sin agua, sin jabón, sin nada. No contaminamos el planeta.
Todo se hace con partículas muy pequeñas que actúan en la limpieza de todo. No hay detergentes, no hay suavizantes, no hay desinfectantes. Nada de eso existe aquí. No contaminamos el planeta, ¿Recuerdan? Entonces, a las amas de casa les va a gustar mucho. Porque nunca tendrán platos que lavar, ropa que lavar. El propio armario limpia la ropa. Perfecto, ¿No?
Así que, queridas, hagan lo posible por estar aquí. Y todo este trabajo que tienen hoy, por cierto, hay algunos queridos que también lo hacen; todo este trabajo ya no existirá. ¡Ah! Otro detalle: no barremos el piso. Porque estamos agradecidos a la tierra que pisamos. ¿Por qué quitarla de nuestros pies? “Ah, pero soy alérgico. Soy alérgico al polvo”. ¿Y alguien aquí estará enfermo?
Todos esos problemas que tienen hoy, aquí no existen. Serán curados por completo, de todo. Así que hagan lo posible por estar aquí. ¡Miren cuántas cosas buenas hay! Y yo estaré aquí, con los brazos abiertos, esperando a cada uno de ustedes. Y tengan la certeza de que esto sucederá muy pronto. Y pronto, en su tiempo.
Para el Código de Luz de hoy, les dejo las siguientes frases:
“¡Todos somos unos!
Todos estamos conectados.
Todos somos hermanos.”
Y todos evolucionamos con un mismo objetivo».
Después de estas frases, diga la siguiente palabra:
¡Camolênticum! ¡Camolênticum! ¡Camolênticum!
Estamos listos, hermanos míos, cada uno de nosotros, para este gran encuentro con cada uno de ustedes en el planeta Tierra. Estamos tan ansiosos como ustedes, pero no dejamos que nuestra vibración decaiga; pero también lo estamos. Y también queremos que suceda pronto. Pero hemos recibido órdenes y, como buen comandante, obedezco cada una de ellas. Solo esperen. Todo a su debido tiempo.
Traducción: Kely Neri
Revisión: Regiani Maria Bugalho


