Queridos hermanos del planeta Tierra,¡YO SOY ROWENA!
No podría dejar de traerles un regalo. Dejo en las manos de quienes me autoricen en este momento un pequeño capullo de rosa color rosado. Este capullo abrirá un poco cada día. ¿Dónde lo pondrás? Colócalo en un florero en su mente, con agua. Y todos los días, di mi nombre: Rowena; y te mostraré cómo estará su rosa.
El objetivo es que esta rosa emane mucho Amor; el Amor que siento por cada Ser de este planeta, y que llene tu corazón de Amor. Ella se abrirá o no. Si tu rosa se marchita o no se abre, no te culpes ni te juzgue; simplemente te falta la entrega; la entrega total a todo este proceso; la confianza, la certeza de que estás en el camino correcto.
Tú me podrás pedir tantas rosas como quieras. Y Yo siempre te colocaré el capullo. Y tú podrás notar tu propia evolución. Tras que la rosa se abra, ya no se marchitará; Ella seguirá emanando Amor; todo mi Amor, por cada uno que la tenga.
Haz este pequeño ritual, pero hazlo de corazón. ¡Y Yo te llenaré el corazón de mucho Amor; ayudándote a resolver, a atraer las soluciones para cualquier tipo de problema; para que todos sean resueltos con Amor, siempre!
No duden de nada, mis hermanos. Estén seguros del camino. La duda puede llevarlos a caminos no preparados. A caminos que pueden llevarlos a más dudas, incertidumbres y a las conexiones erróneas. Recuerden siempre: «Yo estoy en un camino de evolución. No conozco el final de este camino, pero sé que estoy evolucionando».
Esta certeza debe vibrar en sus corazones. Porque es ella que los llevará, poco a poco, a estar mucho, mucho más arriba de la frecuencia de los que emanan casi ninguna luz en el Planeta.
Prepárense, mis hermanos, de corazón abierto de Luz. ¡Emanen Luz! ¡Emanen Amor! Esta es la misión que cada uno de ustedes debe cumplir en este momento: Emanar Luz y Amor. Cada uno a su modo. Cada uno a su forma. Pero con la confianza de que la egregora de Amor está siendo alimentada veloz y poderosamente, y ella cubrirá todo este Planeta. Y cuando esto suceda, todo y cualquiera corazón que no emane Amor y Luz no permanecerá en el Planeta.
¡Haz tu parte!
¡Cumple tu misión!
¡Ha llegado el momento!
¡No dudes de nada!
Para el Código de Luz de hoy, les dejo las siguientes frases:
“¡Yo Soy puro Amor!
¡Yo Soy puro Amor!
¡Yo Soy puro Amor!
Y hago estallar este Amor, y envuelvo a todos mis hermanos.”
Después de estas frases, di la siguiente palabra:
¡Amontória!¡Amontória!¡Amontória!
Y recuerden, mis hermanos, todas las posibilidades están abiertas. Hay mil caminos por elegir. Sepan trazar el camino correcto. Sepan tomar las elecciones correctas. Y seguramente ustedes no se arrepentirán.
Traducción: Ingrid Elena Sanchez Schnoor Nunes
Revisión: Regiani Maria Bugalho
