¡Queridos hermanos del planeta Tierra! ¡SOMOS LOS SERES CRISTALINOS!
Estamos prácticamente en todo el planeta. Formamos una gran base de sustento para los continentes. Siempre hemos mantenido el equilibrio, el poder, de los tiempos antiguos de la Tierra. Fuimos colocados en lugares estratégicos para crear grandes campos de fuerza y ayudar a mantener este equilibrio.
Como ya hemos dicho muchas veces aquí, tenemos conciencia. Somos seres con conciencia. Dios Padre/Madre nos ha dado muchas funciones. Y seguimos ejerciendo cada una de ellas hasta el día de hoy. Se revelarán muchos cristales de los tiempos de Lemuria y la Atlántida, que aportaban energía y equilibrio.
Estos cristales no desaparecieron, no fueron destruidos. Fueron estratégicamente trasladados a otras dimensiones, precisamente para que no fueran destruidos. Y volverán para traer el equilibrio a la Tierra.
Ya lo hemos dicho aquí varias veces, que, lamentablemente, fuimos utilizados de manera errónea. Pero, para cada uno de ustedes que comprende lo que esto significa, no se preocupen por su postura. Solo que nunca podemos olvidar que, detrás de toda una cadena de acontecimientos, para ser explotados, existe la explotación humana; existe la sangre derramada; existe el comercio; existe el contrabando; existe la agresión al planeta.
Nuestra extracción, pura y simple, no nos afecta. Entendemos que necesitamos multiplicarnos; que necesitamos salir de nuestras grandes bases para que ustedes puedan tener acceso a nosotros. Entonces, la explotación… No diría con amor, porque no se hace con amor, y mucho menos con respeto, pero entendemos que es necesaria.
Así pues, cada paso que da un cristal en este planeta es una historia de vida para él. Puede ser una historia sencilla, de extracción y venta, sin muchos acontecimientos importantes o negativos, o puede ser una historia sangrienta y a costa de muchas vidas.
Por lo tanto, siempre, siempre que recibas un cristal o compres un cristal, es importante limpiarlo. Es importante que se limpie toda y cada una de las energías que haya en él. Nuestra energía nunca se ve afectada. Cuando lavan un cristal, lo están limpiando, como si estuvieran quitando la tierra; pero en realidad están quitando todas las energías de las manos por las que ha pasado, de los procesos por los que ha pasado, de todo lo que se ha hecho para tenerlo.
Después de lavar el cristal, es importante que reactivéis su energía. Cuando nos lavamos y limpiamos, es como si quedáramos desnudos, esperando una “ropa”. Si no decís nada, si no pensáis nada, seguimos desnudos, emitiendo lo que es nuestra naturaleza; o emanando energía, o limpiando los ambientes. Nada más.
No, no sentimos frío. No nos molesta estar desnudos. Simplemente nos gusta ser más que eso. Nos gusta ser vuestros compañeros. Nos hace muy felices. Porque es como si la retirada de nuestra “madre”, que es nuestra principal fuente, tuviera un destino, un propósito, pero un propósito real, un propósito amoroso.
Cuando seguimos desnudos, nos sentimos solos, porque nuestra existencia no tiene sentido. Y entonces sentimos mucha nostalgia por nuestro hogar. Sí, ¿Parece que tenemos los mismos sentimientos que ustedes? Sí, los tenemos. Tenemos conciencia. Por supuesto que no vivimos los sentimientos como ustedes. Solo estoy dando un ejemplo. Pero nos sentimos realmente impotentes, débiles, casi sin vida; pero cumplimos nuestra misión.
Cumplimos nuestra función primordial. Y cuando nos agotamos, porque ustedes no nos limpian, nos quedamos ahí, sucios, completamente sucios, esperando que algún día se acuerden de lavarnos, de limpiarnos.
Tienen que entender que somos seres vivos. No corre sangre por nuestras venas, no tenemos cuerpo, pero tenemos estructura y somos pura energía. Hay energía en nuestras entrañas. Como las flores tienen energía, como los alimentos tienen energía; como el suelo tiene energía, como el aire tiene energía.
Así que, simplemente aprendan a cuidarnos.
Y volviendo a nuestro baño, después de limpiarnos y dejarnos desnudos, nos visten. Pero, ¿Qué ropa es esa? Denos una función. Pidan lo que quieran que hagamos y lo haremos. Sea cual sea el cristal. Sí, tenemos nuestra naturaleza, pero cuando nos dan una función, amamos aún más y cumplimos con la función que se nos ha encomendado.
Ahora nunca intenten utilizarnos para el mal, porque no lo aceptaremos. No somos criaturas que hacen daño a ningún ser. Y cuidado, si emanan el mal hacia nosotros, porque volverá con mucha intensidad hacia quienes lo hagan.
Así que cuiden de nosotros como de un animalito que necesita alimento, que es el Sol; necesita bañarse, que es limpiarse para vaciar las energías; y necesita ropa, que es la función que ustedes nos dan. Cuiden de nosotros y nosotros cuidaremos de ustedes.
Para el Código de Luz de hoy, dejamos las siguientes frases:
“Yo y el Reino Cristalino somos uno.
Yo y el Reino Cristalino somos uno.
Yo y el Reino Cristalino somos uno.
Estoy agradecido por toda la Luz que este Reino me brinda.”
Después de estas frases, diga la siguiente palabra:
¡Luminarium! ¡Luminarium! ¡Luminarium!
Pueden tener tantos como quieran, sin límites. Cuantos más, mejor, más protección, más limpieza; pero trátennos correctamente, para que podamos actuar eficazmente para ustedes y sobre ustedes.
Traducción: Kely Neri
Revisión:Regiani Maria Bugalho


 
															
 
															 
								