María – Ansiedad y Desesperación

¡Queridos hijos e hijas del planeta Tierra! ¡YO SOY MARÍA!

En este momento traigo aquel manto y lo coloco sobre cada uno de ustedes, envolviéndoos a cada uno en mi energía y mi Amor. Usen mi manto, es un regalo mío. Piensen en él como algo que les traerá calma, calidez, alegría y mucho, mucho Amor.

Hijos e hijas míos, afronten cada cosa con naturalidad, con calma. Hay prisa por evolucionar, prisa por estar preparados. Pero yo os diría a cada uno de ustedes que la prisa, la ansiedad y la desesperación por hacer cualquier cosa que os lleve a la evolución retrasará vuestro camino. Porque ahí tenéis una lección que aprender, todo hay que verlo con calma, con paz en el corazón, no con desesperación, con ansiedad, queriendo que suceda a cualquier precio.

¿Qué es el equilibrio? Es estar centrado en el aquí y ahora, no en el mañana, no en el pasado, está aquí, en el momento presente. Aprende a vivir el momento, aprende que cuando algo no ocurre en el momento que quieres, para, respira hondo y dite a ti mismo: “esto llegará en el momento adecuado”. Si adquieres el hábito de hacer esto, combates la ansiedad, la desesperación por cualquier cosa.

Hijos e hijas míos, el viaje a la Quinta Dimensión no es una competición de quién corre más rápido, quién llegará primero. No hay concurso, no hay premio para quien llegue primero. Entonces, ¿Por qué tanta ansiedad, tanta desesperación por cada cosa que llega? Ten paciencia, te pregunto, ¿Por qué tanta desesperación y ansiedad?

Todo lo que hacemos no tiene plazo, ni obligación, es en tu tiempo, en el tiempo de tu corazón. Entonces, ¿por qué la desesperación y la ansiedad? ¿El miedo a perder? No, es el ego el que dice: “Corre. Corre porque si no te quedarás atrás, todos los demás se irán y tú te quedarás”. Y entonces te desesperas, te pones ansioso, porque tienes que hacerlo, porque tienes que hacerlo, porque tienes que hacerlo en ese momento. ¿Qué haces con tu energía cuando actúas así? Arruinas todo tu cuerpo, porque la ansiedad es uno de los peores sentimientos para tu cuerpo físico. Porque provoca un inmenso desequilibrio en cada célula, porque necesitan tomar acciones que no estaban preparadas en ese momento, necesitan acelerar, necesitan adelantar, necesitan saltarse pasos, para cumplir con lo que quieres. Entonces, ¿para qué tanta ansiedad, para qué tanta desesperación?

Todo lo que hacemos no tiene plazo, ni obligación, es en tu tiempo, en el tiempo de tu corazón. Entonces, ¿Por qué la desesperación y la ansiedad? ¿El miedo a perder? No, es el ego el que dice: “Corre. Corre porque si no te quedarás atrás, todos los demás se irán y tú te quedarás”. Y entonces te desesperas, te pones ansioso, porque tienes que hacerlo, porque tienes que hacerlo, porque tienes que hacerlo en ese momento. ¿Qué haces con tu energía cuando actúas así? Arruinas todo tu cuerpo, porque la ansiedad es uno de los peores sentimientos para tu cuerpo físico. Porque provoca un inmenso desequilibrio en cada célula, porque necesitan tomar acciones que no estaban preparadas en ese momento, necesitan acelerar, necesitan adelantar, necesitan saltarse pasos, para cumplir con lo que quieres. Entonces, ¿Para qué tanta ansiedad, para qué tanta desesperación?

Hijos e hijas míos, aprendan la calma, aprendan la serenidad, aprendan a vivir en el aquí y ahora. Si algo que realmente deseáis no está sucediendo en este momento o en el momento en que lo deseáis, respirad hondo, decidle a vuestro ego que se calle y repetiros a vosotros mismos: “¡Esto vendrá en el momento adecuado del Dios Padre/Madre!”. Ya está, se acabó. Lo habéis entregado en la línea de tiempo correcto, en el momento correcto. No escuchéis al ego que os grita que tenéis que hacerlo urgentemente porque si no os quedaréis atrás.

Nada es una gincana, no hay campeonato, no hay torneo de quién llega primero o llega más rápido. Aprende a vivir con serenidad, con Amor en tu corazón. Todo te desespera, no tienes paciencia con nada y entonces ¿Qué haces? Molestas a todo el mundo para que te ayuden a resolverlo, ya.

Porque no quieres perder el tiempo tratando de comprender, tratando de hacerlo en tu propio tiempo, en tu propio aprendizaje. No, molestas a todo el mundo para que te ayuden a llegar a donde quieres. ¿De qué ha servido? Te has estresado, has movido a un montón de gente, que probablemente hará lo que le pidas de mala gana, solo para cumplir con tu petición. ¿Y qué consigues con ello? ¿Has aprendido algo? No, porque le has dado a otro lo que tú tenías que hacer.

Así que aquí estamos, observando cómo reacciona cada uno de ustedes ante los acontecimientos. Algunos reaccionan con naturalidad, ya han aprendido que todo tiene su tiempo… “Que si no tengo éxito ahora, lo tendré mañana o pasado mañana. Y lo creeré. Mañana lo conseguiré”; y lo repiten de corazón. Y al día siguiente, con calma, todo sale bien. “Ah, no ha salido bien, mañana lo conseguiré”. Y esa será la búsqueda, no es involucrando a todo el mundo para algo que ni siquiera intentas hacer, que llegarás a alguna parte.

Hijos e hijas míos, aprended a superar los obstáculos, aprendan a encontrar vuestra propia salida. ¿Por qué siempre tenéis que pedir ayuda al otro? ¿Está el otro a vuestra disposición? No, no lo está. Nadie lo está, pero tú empujas al otro a hacer algo que eras tú quien tenía que hacer. Como siempre dice Miguel: Salgamos de la red, superemos nuestros propios límites, aprendamos a encontrar salidas sin involucrar a nadie, sí, pongámonos en plan: “Ah, no puedo hacerlo. Ah, no sé cómo hacerlo. Ah, esto. Ah, eso”. Siempre el pobrecito, siempre necesitando que otro haga las cosas, ¿Por qué? Porque no quieres aprender o porque es más cómodo que lo haga otro.

Yo diría que la segunda respuesta es la que llena a la mayoría de ustedes.

Hijos míos, no hay tiempo para aprender, no hay tiempo para querer ir más allá de lo que no se conoce, no existe. Dejad de haceros los pobres desgraciados, dejad de haceros los tontos y de esperar siempre la ayuda de los demás. Piensa esto: la otra persona tiene sus atribuciones, tiene sus tareas y tú le estás poniendo una más. Porque ni siquiera te has tomado la molestia de intentar buscarla, de intentar resolverla. “No, no haré eso, solo pediré ayuda y pronto”. Así es como actúas.

Nunca quieren aprender nada porque siempre habrá alguien que lo haga por ti. Entiende que de esta manera, ambas partes están equivocadas; el que pregunta y el que hace. Porque el que hace está ayudando al otro a permanecer en la red, sin buscar nunca el camino, estando siempre seguro de que alguien lo hará por él.

Hijos e hijas míos, puede que llegue un momento en el futuro en el que no haya nadie y ¿Qué haréis? ¿Os sentaréis y lloraréis u os levantaréis y trataréis de encontrar una salida? Porque estáis acostumbrados a todo, a pedir ayuda, a cualquier cosa pedís ayuda, ¿Por qué? Así que todo lo que hacemos tiene un propósito, todo lo que hacemos tiene un porqué, y dentro de todos estos aspectos hay un aprendizaje para ti. Deja de lanzar tus problemas a los demás para que los resuelvan, es tu problema, no el de otro, aprende esto.

Hijos míos, el otro ya tiene sus problemas, no necesita tener uno más, porque estás poniendo en sus manos algo que tú podrías hacer. Pero eso porque estáis acostumbrados a pensar: “No sé. No puedo hacerlo. No soy capaz”, siempre empuja al otro. Ya veis, hijos e hijas míos, que esto también es una lección. Aprendan a manejaros por vosotros mismos, buscad soluciones, pedid ayuda para aprender, no para que lo hagan por ustedes.

Todavía queda mucho camino por recorrer para todos vosotros y son estos pequeños puntos los que van a hacer un camino frágil o fuerte. Porque quien depende de los demás para todo no está construyendo un caminar fuerte, está construyendo con muros de algodón y a la primera lluvia se va porque no son muros fuertes. Busca tus propias respuestas, busca tu propio aprendizaje, deja de depender de los demás y sobre todo, no pongas en el regazo de otro un problema que él no pidió resolver. Se lo estás poniendo en el regazo, ¿te lo ha pedido él? No, él no lo pidió, pero tú fuiste y se lo pusiste en el regazo: “Hazlo por mí”. ¿Por qué es cómodo, no? Te estás columpiando en la red y él está lleno de cosas que hacer, porque tú y muchos otros le ponéis cosas en la mano.

Hijos e hijas míos, despierten, salgan de la red, comiencen a buscar sus propios caminos, comiencen a actuar con sus propias piernas, con sus propias mentes, dejen de depender de los demás. El camino es de cada uno, ¿Por qué involucrar al otro en vuestro camino? Hay ciertas cosas que no se pueden pasar a otro, son vuestra responsabilidad. ¡Miraos, hijos míos! ¿Por qué tanta ansiedad, por qué tanta desesperación?

No estamos en una gymkhana, estamos en un momento de corazón, puro corazón. Y corazón es calma, corazón es paz, corazón es armonía, corazón es equilibrio, no desesperación, esto no es corazón. Calmemos nuestra mente, aprendamos a mirar todo en el aquí y ahora. No pudo ser ahora, mañana será. Siempre confiando en que mañana será y con esto aprendes a aceptar el momento, a aceptar que el mundo no gira a tu alrededor, el mundo no gira alrededor de nadie. Eres tú quien hace tu jornada, no el mundo.

Así que si algo no llega en el momento que quieres, es que hay algo que tienes que aprender. ¿Qué es? Solo tú lo sabrás. Entonces, ¿Por qué desesperarse? Si no llega ahora, es porque no tenía que llegar, llegará en el momento adecuado, y tienes que aprender a esperar el momento adecuado. Y sobre todo, no involucres al otro porque no haya llegado en el momento que tú querías. El viaje es tuyo, el momento está dentro de tu viaje, el otro no tiene nada que ver.

Dejen, hijos e hijas míos, de ver todo con desesperación y ansiedad. Cambien esta vibración por la del Amor y la calma y verán como todo será más fácil, porque aprenderán a comprender que todo tiene su tiempo en las pequeñas cosas y sobre todo, dejen de poner en el regazo de los demás algo que les corresponde hacer a ustedes.

Traducción: Kelly Neri

Revisión: Regiani Maria Bugalho

Posts recentes

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Carrito de compra

Termo de Uso de Imagem de Foto Enviada para o Site anjoseluz.net

Este documento estabelece os termos e condições para o uso de imagens fotográficas enviadas para o site www.anjoseluz.net, operado pela empresa Anjos e Luz Terapias Holísticas. Ao enviar sua fotografia para o site www.anjoseluz.net, você concorda integralmente com os seguintes termos:

  1. Direitos Autorais e Propriedade Intelectual: 1.1. Você mantém todos os direitos autorais e de propriedade intelectual sobre as imagens fotográficas enviadas. 1.2. Ao enviar a imagem para o site www.anjoseluz.net, você concede à Anjos e Luz Terapias Holísticas uma licença não exclusiva, irrevogável, gratuita e mundial para utilizar, reproduzir, exibir e distribuir a imagem em conexão com o site www.anjoseluz.net e suas atividades relacionadas.

  2. Uso da Imagem: 2.1. A Anjos e Luz Terapias Holísticas poderá utilizar a imagem enviada para: a) Exibir em seu site, redes sociais e materiais promocionais.

  3. Garantias e Responsabilidades: 3.1. Você garante que possui todos os direitos necessários sobre a imagem enviada e que sua utilização pela Anjos e Luz Terapias Holísticas, conforme descrito neste documento, não viola quaisquer direitos de terceiros. 3.2. Você concorda em isentar a Anjos e Luz Terapias Holísticas de qualquer responsabilidade decorrente de qualquer reclamação de terceiros relacionada ao uso da imagem conforme permitido por estes termos.

  4. Consentimento de Uso de Imagem: 4.1. Ao enviar sua imagem para o site www.anjoseluz.net, você consente que sua imagem seja utilizada de acordo com os termos estabelecidos neste documento. 4.2. Você consente que sua imagem possa ser exibida publicamente e compartilhada em conexão com as atividades da Anjos e Luz Terapias Holísticas.

  5. Modificações nos Termos: 5.1. A Anjos e Luz Terapias Holísticas reserva-se o direito de modificar estes termos a qualquer momento, mediante aviso prévio razoável. O uso contínuo do site www.anjoseluz.net após tais modificações constitui aceitação dos termos revisados.

  6. Legislação Aplicável: 6.1. Estes termos serão regidos e interpretados de acordo com as leis do Brasil. Quaisquer disputas decorrentes destes termos serão submetidas à jurisdição exclusiva dos tribunais competentes no Brasil.

Ao enviar sua imagem para o site www.anjoseluz.net, você reconhece ter lido, compreendido e concordado com estes termos de uso de imagem. Se você não concorda com estes termos, por favor, não envie sua imagem para a Anjos e Luz Terapias Holísticas.