¡Queridos hermanos del planeta Tierra! ¡SOY METATRÓN!
Llevo conmigo una gran burbuja de Luz, en la envuelvo a todos los que están aquí, con el corazón abierto. Creando un escudo, una protección contra todas las adversidades que existen en este mundo.
Créanme, mis hermanos y hermanas, cada uno de ustedes es una Chispa Divina, poderosa, fuerte y con toda la sabiduría que necesitan para saber cómo crear y mantener su camino hacia la Quinta Dimensión. Ninguno de ustedes necesita libros, enciclopedias o bibliotecas para este aprendizaje. Sus propias experiencias, todo lo que su alma ha vivido, les da la sabiduría y la certeza del camino correcto a seguir. El que conducirá eficazmente a cada uno de ustedes al centro de la Luz.
El ego ha sido extremadamente alimentado, nutrido y valorado. Y muchos de ustedes aplican todos estos valores todo el tiempo. Colocándose siempre como el centro de todo, el centro de atención, el centro de los problemas, el centro de las decisiones. Donde lo correcto es no tener un «yo».
Por supuesto, cada uno de ustedes es una Presencia Divina, el Yo Soy. Pero todos formáis parte del Todo. No hay bola que os limite en relación al Todo. Estáis insertados en él. Así que la gran sabiduría en estos tiempos es tener siempre el Ser dentro del Todo. Es ser siempre consciente de que cada movimiento energético, ya sea a través de pensamientos, palabras o acciones, afecta al Ser y al Todo. Y todo, todo lo que hagas, siempre será devuelto. Porque si emanas, recibes de vuelta.
No hay ley. No hay nada contrario a esto. Esta es la ley más sabia que Dios Padre/Madre creó en el universo. Donde cada uno de ustedes es responsable de lo que emana. Y todo lo que emana lleva vuestra firma. Nadie la toma, nadie la asume. No puede ser transferida a nadie. Siempre será tuya, estés donde estés en el universo. Tu energía siempre llevará tu firma.
Así que, hermanos míos, no se equivoquen. Todo tiene una consecuencia. Puedes no creerlo. Podéis vivir pensando que podéis hacer lo que queráis y que no os pasará nada. Pero os digo que en estos tiempos, todo es muy rápido. Y las cosas están volviendo muy rápidamente. No será en la próxima encarnación, será en ésta. Porque necesitas aprender y liberarte de todas esas ataduras; de esos conceptos y aprendizajes que te han sido dados e impuestos durante tanto tiempo.
Antes de emanar nada, ponte en el lugar de la otra persona. Y recibe exactamente lo que emanas. Detente y observa cómo te sientes. Ponte en el lugar de la otra persona. Este será un gran ejercicio, para que comprendas lo que provocas; para que aprendas todo lo que generas en el Todo, aunque pienses que es algo insignificante.
Nada es insignificante para el Universo. Todo es energía. Y por muy tonto que sea el acto, saldrá de ti y volverá a ti. Pero si tiene una dirección, una persona, entonces este acto se vuelve muy peligroso. Porque podrías generar una reacción en cadena, en la que a esa persona que fue el destino de tu energía podría gustarle lo que has hecho mal y enviarlo también a otros, y así sucesivamente.
Así que ¡mira lo que has causado indirectamente! Has provocado un movimiento negativo en el Todo, que se está extendiendo como una enfermedad. Y fuiste tú quien lo causó. No, es inútil pensar que no tienes la culpa. No se trata de señalar con el dedo. La cuestión es ser consciente de lo que no haces; ser consciente de lo que provocas cuando generas algo.
Así que siempre, rápidamente, debes hacer el ejercicio; de todo lo que estás pensando, generando y haciendo y diciendo – ponte en el lugar del otro y del Todo, y mira hasta dónde se extenderá. Este mundo del que tanto te quejas, ¿quién lo creó? Lo creaste tú. No fue nadie, no fue Dios Padre/Madre. Fueron tus propias energías generadas para el Todo o para alguien más; y este alguien más lo multiplicó.
«Ah, pero no hay más remedio. Ya es demasiado tarde». Mucha gente piensa esto. Que no tiene sentido hacer nada; que el mundo ya se ha corrompido tanto que no queda nada por hacer. Así que os digo a cada uno de vosotros ¿Qué quieres vivir mañana? ¿Queréis seguir quejándoos y viviendo en un mundo que empeora cada vez más, o queréis empezar a cuidaros ahora, tener esta sabiduría y empezar a hacer algo que tal vez no suponga una gran diferencia para ustedes visualmente, pero que energéticamente hablando marcará toda la diferencia?
¿Por qué? Porque quita el poder de lo negativo que está ahí. Le quita el poder a aquellos que te están manipulando. Así que necesitas despertar; necesitas cambiar tus pensamientos y actitudes para que el Todo pueda cambiar. Y no te preocupes si lleva tiempo o no. ¿Tiempo para qué? ¿Sabes cuándo ocurrirá todo?
Así que ha llegado el momento. Rompe este círculo vicioso. Rompe la generación de estas energías. No alimentes más a este gran egregor. Y recuerda siempre: Cuando hay una intención de Amor y dentro de los preceptos de la Luz, siempre hay un Ser de Luz para amplificarla. Así que, si cambias tus actitudes, cambias tus vibraciones, habrá millones de seres para amplificar lo que estás haciendo.
Así que te pregunto: ¿Vale la pena cambiar tus energías hoy o no?
Traducción: Ana Maria Souza
Revisión: Regiane M. Bugalho
