Queridos ¡YO SOY EL ARCÁNGEL MIGUEL!
Las batallas, por su propio nombre, designan algo que necesita ser vencido. ¿Y qué es lo que hay que vencer? La duda, la incredulidad, el descreimiento en todo lo que ya fue vivido, en todo lo que ya fue dicho y aprendido. Estás en medio de esta batalla; pero no es una batalla contra el otro, es una batalla interna, de tu conciencia y de ti mismo, en la que el ego insiste en quitarte de en medio, en mostrarte que nada de esto servirá de nada, que todo lo que has hecho, ¿Qué te ha aportado? Y muchas veces te paras a pensar, y realmente no ves ningún resultado.
Pero ese es el punto de vista del ego. Ahora bien, si miras el resultado con el corazón, te darás cuenta de cuánto has crecido, cuánto has cambiado, cuánto has dejado atrás de tus propias experiencias. Entonces, ¿quién está ganando esta batalla, tú o tu ego diciendo que no? Puedo decirte que es una batalla constante. ¿Terminará algún día? Absolutamente, porque aprenderás a vivir en el Amor incondicional y no habrá más batallas que ganar o pelear.
Aprended mis hermanos, las batallas son necesarias, pero deben ser vividas intensamente con Amor. Cada punto, cada fase más difícil, es donde hay que poner más Amor, y seguramente con cada pequeña victoria, ten la certeza: ¡Tú eres poderoso, tú puedes, tú puedes hacerlo! No te dejes llevar por el ego, no te dejes llevar por lo que digan los demás. Tú eres quien conoce tu camino. Así que vive tu batalla diaria, pero no olvides que es una batalla solitaria. Eres un ejército de uno. Nadie luchará contigo. Incluso puedes pensar que tienes soldados a tu lado con el mismo propósito, pero puedo asegurarte que no es así.
Cada uno tiene su propia batalla que librar y no perderá el tiempo en la de los demás. El camino es solitario hermano. La batalla es solitaria, es un ejército de un solo soldado, porque los caminos fueron creados por tu alma, fueron creados por tus acciones; así que eres tú quien tiene que corregirlos, eres tú quien tiene que superarlos. No esperes al otro, no esperes a nadie. Cuenta solo contigo mismo. La batalla es tuya. ¿Y con qué armas luchar? No hay armas, solo hay un sentimiento: el Amor; él te dará el poder y la fuerza para ganar cualquier batalla, sea cual sea. Porque con el Amor creas alas, creas poderes, tienes fuerza, tienes coraje, y nada, nada en este universo, podrá destruirte. Aprovechando, quiero dejar aquí la invitación para nuestra meditación más tarde hoy a la hora habitual, para el portal 8/8 el Portal de Leo. ¡Será fantástico!
Traducción: Kelly Neri
Revisión: Regiani Maria Bugalho