Queridos hermanos y hermanas del planeta Tierra ¡YO SOY SAINT GERMAIN!
Traigo mi Llama Violeta y la pongo en este momento bajo los pies de cada persona que tenga un corazón abierto para recibirla. Para que pueda actuar y limpiar todo lo que necesita ser limpiado en vuestras almas, en vuestros cuerpos.
Este es un tiempo para la transformación. Es tiempo de cambio. El tiempo está maduro para muchas agitaciones en vuestros corazones. Las transformaciones están ocurriendo en todas partes; fuera y dentro. Ustedes también están atravesando transformaciones internas. Vuestras propias verdades están saliendo a la superficie. Vuestro ser interior está, como reflejo de vuestro ser exterior, siendo extremadamente sacudido, y se hace cada vez más necesario mirarlo, tratarlo; pero tratarlo con mucho Amor, con mucho afecto, para que cada punto que surja deje efectivamente de existir.
No te preocupes por lo que venga de fuera. Superarás lo que tengas que superar. Nada cambiará eso. Hay que aprender las lecciones. Puede que hayas tenido un camino perfecto hasta este punto, pero aún tienes que pasar por todo lo que está por venir. ¿Por qué? Hay que aprender.
Por supuesto, podemos decir que el propio camino ha hecho el camino un poco más fácil, le ha quitado intensidad, pero la lección sigue ahí. Y tendrás que pasar por ella. Así que no os engañéis. No penséis que estáis libres de todo. Todo el mundo tendrá lecciones que aprender; algunas más profundas, otras no tanto. Pero todas las tendrán, especialmente en relación con el planeta.
Necesitáis tomar conciencia. Necesitas comprender lo que el planeta representa realmente en tu vida. No es algo muerto, como mucha gente piensa, algo sin vida, algo en lo que puedes hacer, lo que quieras sin consecuencias. Todos tenéis que entender qué es el planeta para cada uno de ustedes. ¿Qué importancia tiene en vuestra vida?
No os asustéis por nada. No tengas miedo de nada. Lo superarás y llegarás al otro lado. No intentes esquivarlo. El momento es de atención total. Atención al interior, y atención al exterior cuando te golpea. No os equivoquéis, hermanos míos. No por haber recorrido un camino, que estás preparado para recorrer nada más. Esto depende enteramente del camino de cada persona.
Así que vive cada momento con conciencia. Vive cada momento con Amor, con la certeza de que estás haciendo lo mejor que puedes. Y todo, todo pasará. No te preocupes por lo que vendrá. Vive el momento presente. Es el momento importante.
Para el Código de Luz de hoy, di lo siguiente:
«Soy un ser poderoso.
Soy capaz de transformar mi camino.
Soy capaz de suavizar mi camino.
Todo lo que tengo que hacer es mirarlo, con mucho Amor».
Y di esta palabra tres veces:
¡Partimontimun!
¡Partimontimun!
¡Partimontimun!
Y nunca olvidéis, hermanos míos, que nada de lo que os ocurra será un castigo. A pesar de todas las enseñanzas, muchos todavía le preguntan a Dios: «¿Por qué les hace esto?» Es muy importante que entiendas, Dios Padre/Madre es Amor puro. Él no juzga ni castiga. Él solo quiere que tú, como hijo obediente, aprendas de tus errores. Para que puedas convertirte en un ser mejor, más evolucionado, tan amoroso como Él. Eso es todo lo que quiere.
Así que lo que te pasa es fruto de tus elecciones, de los caminos que has recorrido, de las situaciones que has creado; no por la otra persona, no por Él. Aprende eso de una vez por todas.
Traducción: Regiani M. Bugalho
Revisión: Ana Maria Souza
