¡Queridos hermanos del planeta Tierra! ¡SOY EL ARCÁNGEL URIEL!
Hoy traigo conmigo una pequeña llama. La Llama de la Virtud. Es una llama azul verdosa, creada para este momento. Abre tu mano derecha. Pon la palma de la mano hacia arriba. Pongo esta pequeña llama en la palma de tu mano. Y permanecerá allí, trayéndote la virtud. Puedes cerrar la mano. No quema y no desaparecerá.
¿Y qué significa la Llama de la Virtud? La llama del camino verdadero. La llama del sentimiento verdadero, del pensamiento verdadero. La llama que conduce al camino correcto. Pero también tienes el libre albedrío de no aceptarla. Y si no la quieres, solo tienes que decir: “Arcángel Uriel, no quiero la Llama de la Virtud”. Y desaparecerá de tu mano.
Para aquellos que aceptaron la llama, será un refuerzo, para mostrarles siempre el camino correcto. Siempre que tengan dudas sobre qué camino seguir o si están siguiendo el camino correcto, abran la palma de la mano, visualicen la llama que hay allí y sentirán exactamente el resultado del camino que están siguiendo.
¿Cómo se sentirá? Cada uno a su manera. No hay una forma general para todos. Algunos verán la llama, otros la sentirán. Puede ser un ligero calor en la mano o un enfriamiento. Si se calienta, estás en el camino correcto. Si se enfría, estás lejos de él.
Podrán sentir alegría en su corazón o no. No necesito explicar lo que significa. Sí, ustedes tienen la Presencia Divina, pero muchos aún dudan de este contacto. No se sienten preparados, no se sienten merecedores. Todo lo que escuchan piensan que es de la mente. Entonces les estoy dando otro recurso, para que cada uno encuentre el camino. Pero incluso escuchando la Presencia Divina, si quieren estar seguros de lo que está diciendo, usen la llama. Y puede ser una forma de que empiecen a creer en lo que escuchan, en lo que se les dice.
Siempre habrá alguien que diga: «Pero yo no veo nada, no siento nada». Mientras sigas creyendo eso, efectivamente no verás nada, no oirás nada, no sentirás nada, porque te estás bloqueando. Le estás diciendo al universo: “No soy capaz. No lo merezco. No puedo. No estoy preparado. No quiero”.
Entonces, aprende a romper estos paradigmas que estás creando para ti mismo. Confía. ¡Cree! Eres capaz porque eres un Ser Divino y lograrás, efectivamente, tener este contacto. Dejemos de lado tanta negatividad. La Luz está limpiando todo intensamente, abriendo tus caminos, limpiando tus ataduras. No quieras permanecer atado a ellas. Es momento de soltar. Es momento de vivir tus propios poderes; los poderes que tiene tu alma.
Entonces deja de repetir eso. Confía en ti mismo. Confía en lo que ya has aprendido. Y llegarás allí, sin duda alguna. Utilicen la Llama de la Virtud para todo, para cualquier proceso, para eliminar cualquier duda, y sepan que estarán en el camino correcto, siempre.
Para el Código de Luz de hoy, les dejo las siguientes frases:
“Necesito aprender a confiar en mí.
Necesito aprender a confiar en mis poderes.
Necesito aprender a confiar en el proceso.
Porque Yo Soy, un ser divino y evolucionado.”
Después de estas frases, diga la siguiente palabra:
¡Montelíricum! ¡Montelíricum! ¡Montelíricum!
No se aferren a nada, hermanos míos. Eliminen las dudas, los temores. Deseen ver la verdad. Deseen ver el camino a seguir. Esto también es una elección: desear ver el camino correcto.
Muchos de ustedes saben que están en el camino equivocado. Por eso, no buscan nada. No consiguen nada. Porque no quieren ver la verdad. ¡Cuidado! Mañana puede ser demasiado tarde para retomar el camino correcto.
Traducción: Kely Neri
Revisión: Regiani Maria Bugalho


 
															
 
															 
								